Quevedo. Marco Franco Cortez, no sólo es empresario, también es agricultor, docente y comerciante. A sus 37 años aspira ser alcalde de Quevedo para transformarlo en una ciudad próspera.
El candidato de la Unidad Popular lista 2 abrió las puertas de su casa a ALDIA para mostrarnos su lado humano, el amor hacia su familia, la pasión por su trabajo y la bondad y solidaridad que ha aprendido de sus padres.
¿Qué significa la familia para usted?
Es el factor más importante que tiene todo ser humano, es la fuerza que motiva salir a trabajar el día a día. Yo disfruto de mi familia, también de mi ciudad donde generamos progreso.
¿Cierto que va a ser padre por segunda ocasión?
Si. Es una gran bendición que tiene la familia, es una alegría indescriptible que viene a generar cambios positivos y mayor motivación.
¿Cómo se va a llamar su bebé?
Es un niño. Se llamará Marco Orlando, como mi padre y como yo.
¿Por qué el mismo nombre, es algo tradicional en ustedes?
Lo más bonito es ver cómo se forma una relación o vínculo con tu padre, esa es la realidad porque escogemos el nombre, en mi caso siempre va por el cariño, amor, respeto, siempre uno quiere conectar con el ser querido.
¿Qué hace Marco Franco en sus tiempos libres?
Depende, se cree que vida del emprendedor y empresario tiene mucho tiempo libre, pero la realidad es que tenemos poco tiempo…tenemos muchas obligaciones, en la agricultura se trabaja los 365 días del año…hacer parir la tierra es un trabajo alegre y complicado, pero pese a ello se planifica para compartir con la familia.
¿Usted es un hombre de trabajo, un emprendedor?
Si. Nuestro trabajo es agrícola, en este sector hay que luchar con el mal estado de los caminos, inseguridad, el precio de insumos altos, comercialización en desventaja. Pero ese es el emprendedor, el que saca lo mejor de sí y hace que las cosas sean favorables ante la adversidad.
¿Le hace al machete y garabato?
Deme un machete y un garabato y verá cómo hago mi trabajo…(risas)
El que comanda un gran equipo tiene que ver que estén las herramientas, que el pago del trabajador esté a tiempo, que se proyecte a dónde ir…mi padre me enseñó a trabajar, a prosperar a base de sacrificio … de sacar el mejor rendimiento de los recursos.
¿De qué equipo es Barcelona o Emelec?
Soy barcelonista y del Deportivo Quevedo. Tengo la camiseta de Barcelona autografiada cuando quedó campeón.
¿Le duele cuando pierde el equipo?
Si. Si duele. Duele cuando pierde su equipo… pero también ha estado en momentos gloriosos … se lo que es ganar un campeonato, estar ahí vivirlo… y también sufrirlo.
¿Qué le gusta comer, prefiere los agachaditos o la comida gourmet?
Soy un hombre de pueblo. Me gustan los hot dog, los que venden por el UPC de la 12 de Octubre, los asados, el encebollado que hay por el por la Casa del Cacao, en la vía a Cañalito… el caldo de salchicha, me gusta consumir los productos de nuestra ciudad… de huecas de comida no me va a ganar. (Risas)
¿Entonces no es exigente para la comida?
No. Soy de buena cuchara pero no complicado en la comida, puede comer desde un KFC hasta un arroz con atún, de hecho ese, el arroz con atún es mi comida favorita.
¿Y sabe cocinar?
(Sonríe) Dije que era buena cuchara, prefiero comprar KFC, lo que puedo hacer es un arroz con atún y una taza de café, el agua hervida me queda muy bien. (vuelve a reír)
¿Por qué está en la política y aspira a ser alcalde de Quevedo?
Porque hay injusticias, personas con discapacidad, adultos mayores… hay mucha desigualdad, por eso estamos en política… Algo que me ha enseñado mi papá es que ni la tierra de las uñas nos la llevamos cuando morimos. Queremos que las cosas cambien, no hay una sociedad buena, si uno no es más humano
¿Usted es un hombre solidario, lo aprendió de sus padres?
El principio y el fin de este mundo es el ser humano, la gente se equivoca y piensa que es el dinero, el dinero al final del día es un bien complementario…lo hace el ser humano mediante su trabajo , al dinero le hemos puesto un papel moneda que identifica el valor de ciertas cosas pero la vida humana no tiene precio.
Si. El servir siempre te deja una satisfacción… En el terremoto del año 2016 fuimos ayudar a la zona cero, llegamos con camión de víveres dejando vituallas, alimentos…Vivíamos tiempos de dolor, historias tristes.
¿Cuáles son sus principales propuestas en caso de llegar a la alcaldía?
Tenemos varias. En esta ciudad el agua no vale… solo alguien que no tiene noción de lo que está haciendo se le ocurre hacer pozo para darle agua a la gente.
Por eso vamos a crear dos plantas de agua, que, si se puede, dicen que no existe la plata, yo pienso que lo que no ha existido es un buen administrador porque en catorce años han recibido más de 420 millones de dólares, lo que no han querido es hacer las cosas bien.
¿Y en lo relacionado con la seguridad, qué piensa hacer?
La seguridad se trata de un conjunto social. La inseguridad no se va a acabar sino que atenderemos a los jóvenes. A los niños hay que darle como herramienta para que se defiendan en el conocimiento, la educación, los valores, para ser mejor persona y no sucumbir en la vida fácil.
Vamos a fortalecer la seguridad trabajando en equipo junto a la Policía, Miliares, CTE.
La delincuencia se combate con trabajo. Se van a crear zonas francas para generar fuentes de empleo con técnicos quevedeños y mano de obra quevedeño, una vez que esté creada traeremos inversión y eso creará fuente de empleo.
¿Y sobre la salud, qué proyectos tiene?
En cuanto a la salud, el día siguiente que me posesione como alcalde vamos a donar el terreno y a exigir lo que Guillermo Lasso le prometió a Quevedo, construir un hospital de especialidades…Tenemos tres locaciones que serán puestas a disposición del Ministerio de Salud para que se pueda construir al hospital.
¿Cómo ve a Quevedo en el futuro?
Veo a un Quevedo del trabajo, de la salud, del agua, un Quevedo con acceso a viviendas, donde haya seguridad, paz, veo a niños pintando las paredes con sus sueños. El Quevedo del comercio, de la familia, del progreso.
¿Qué mensaje le diría a los Quevedeños?
Quevedeños, ustedes tienen en sus manos crear el progreso de la ciudad. Tienen la oportunidad de elegir en quedar con la misma política caduca o pasar a la nueva generación, darle la posta a gente nueva para que construyamos juntos el Quevedo que va sacar adelante a todos los ciudadanos.
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