Se cree que es oriundo de Limones, un pequeño poblado ecuatoriano de la provincia costera de Esmeraldas. Walter Patricio Arízala Vernaza, alias «Guacho», es el ex guerrillero que habría secuestrado a un periodista, un fotógrafo y un chofer del diario El Comercio, de Quito. Hoy lidera las disidencias de la columna móvil Daniel Aldana de las FARC.
Dentro de las FARC, «Guacho» formó parte del Frente 29, que apoyaba al bloque Sur de la guerrilla, una de las unidades que más dinero recaudó a través del narcotráfico. Tras 10 años dentro de ese bando y un conocimiento profundo del negocio de los cultivos ilegales, «Guacho» se desvinculó de las FARC en el año 2016 para formar su propia banda, el denominado Grupo Armado Residual Oliver Sinisterra, que se dedica a cuidar campos de coca en Tumaco, ubicado en el suroccidente del Departamento de Nariño, en la frontera con Ecuador.
Allí opera en el área de los ríos Mira y Mataje y, según dijo el año pasado el Fiscal colombiano Néstor Humberto Martínez, «Guacho» podría generar rentas semanales de 25 millones de dólares. Nariño es, según un informe de las Naciones Unidas, el departamento colombiano con más cultivos de coca.
Tumaco se ubica frente a Esmeraldas, a dos horas de Limones y una de San Lorenzo. En este municipio operan disidentes de las FARC y el Clan del Golfo, y se presume que territorios ecuatorianos son usados para el tráfico de cocaína.
«Guacho» habría ingresado a las FARC en 2007, reclutado por «Alias Alexis» o «Tachuela». Dentro de esta organización guerrillera fue organizador de masas, jefe financiero y explosivista; también participó en varias acciones contra la fuerza pública.
El ejército colombiano ha dicho que «Guacho» tiene amplia experiencia en cometer acciones terroristas, y que el año pasado era el encargado de obligar a los campesinos, bajo amenazas, a movilizarse para impedir la erradicación de cultivos ilícitos.
El mismo «Guacho» dijo el 10 de Octubre de 2017 a la cadena colombiana RCN que en las FARC tuvo el rango de comandante de guerrilla, y que su frente tiene 250 unidades armadas, además de la milicia que tiene por fuera. Se consideran guerrilleros activos, no disidentes.
El año pasado, el Gobierno colombiano lo acusó de haber perpetrado la masacre que costó la vida a unos seis civiles en Tumaco, lanzando cilindros bomba y ráfagas de ametralladora, por lo que se convirtió en el criminal más buscado del departamento de Nariño.
Recientemente, en una entrevista con RCN, el comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Alberto Mejía, dijo que a medida que «Guacho» iba tomando experiencia dentro de las FARC empezó a conocer el negocio del narcotráfico, manejar los eslabones, laboratorios, movilizar los insumos y utilizar los corredores de movilidad, «por eso le parece poco atractivo meterse en el proceso de paz, y en su mentalidad de narco le parece más atractivo continuar delinquiendo con el grupo Oliver Sinisterra».
El 17 de octubre un operativo colombiano destruyó en Tumaco un laboratorio en el que se procesaban más de dos toneladas de clorhidrato de cocaína por semana, que presumiblemente le pertenecía a «Guacho» y se dijo que él huyó a la población de San Lorenzo, en Esmeraldas, Ecuador.
En noviembre se declaró en Colombia la «caza» de «Guacho» y empezaron intensos operativos contra su organización. En uno de ellos participó Ecuador, interceptando a dos de sus miembros en una embarcación cerca de la Isla Palma Real, en la población de San Lorenzo.
Sin embargo, no fue hasta 2018 que los ecuatorianos comenzaron a oír de «Guacho»: el 27 de enero hubo un atentado terrorista en Ecuador contra al comando policial de San Lorenzo, en donde explotó un coche bomba, dejó 28 heridos. El atentado, inédito en el país, parece haber abierto la puerta para otros de corte similar.
El presidente ecuatoriano Lenín Moreno aseguró entonces que el atentado fue una respuesta a los intentos del Gobierno por frenar el narcotráfico y que «fue un acto terrorista, ligado a bandas narcotraficantes que han sido golpeadas por el Estado ecuatoriano».
La población de San Lorenzo se ubica a 80 km en línea recta de la frontera con Colombia. Entre 2000 y 2005 fue muy golpeada por los efectos del conflicto armado interno de Colombia y recibió a muchos refugiados de ese país.
En un segundo atentado, en febrero, en el sector de El Pan, en San Lorenzo, hombres armados abrieron fuego contra una patrulla militar ecuatoriana; el enfrentamiento dejó dos uniformados heridos, parte de una patrulla militar que recorría la frontera. El atentado también se atribuyó a grupos irregulares de Colombia.
Otro ataque terrorista se dio el 16 de marzo, en la población de Borbón, en un cuartel naval, ubicado también en Esmeraldas, fronteriza con Colombia. Ese atentado también se vinculó a disidentes de las FARC.
El 20 de marzo, tres miembros de la Marina ecuatoriana perdieron la vida y otros siete resultaron heridos al detonar un artefacto explosivo artesanal ubicado a un costado de una carretera, mientras hacían patrullaje en la zona de Mataje, provincia de Esmeraldas. Guacho también fue vinculado a esta matanza.
Desde el 26 de marzo, se encuentran secuestrados Javier Ortega, periodista, Paúl Rivas, fotógrafo, y Efraín Segarra, conductor de diario El Comercio, de Quito. Según el comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, Alberto Mejía, el autor del secuestro es» Guacho».
El equipo periodístico de El Comercio fue secuestrado en la parroquia de Mataje, en Esmeraldas, y se presume que fueron llevados a territorio colombiano.
El 3 de abril, RCN de Colombia colgó en su cuenta de Twitter un video que dijo que es la primera prueba de supervivencia de los secuestrados. En las imágenes aparecen Rivas, Ortega y Segarra encadenados.