Quevedo. En la mayoría de los hogares ecuatorianos tenemos animales domésticos con los que terminamos encariñandonos y para identicarlos les colocamos nombres.
Por ejemplo, quienes tienen perros, comúnmente le colocan de nombre bobbie o lassie.
Mientras que, quienes tienen gatos los nombran como: tom o micifu.
¿Pero por qué motivo les colocamos nombre?
Poner nombre a un animal indica proximidad afectiva, mientras que la ausencia de nombre, o el empleo de denominaciones frías, acrecienta las distancias.
Podríamos decir que confiere un halo de “humanidad”.
Sin duda, poner nombre no es cosa sencilla, sobre todo si pensamos que es un tema que acompañará a la mascota que estará junto a nosotros toda la vida.
Adempas, lo utilizaremos una y otra vez a lo largo del día.