Quevedo. Los buses que circulan por los pasos laterales del puente desnivel tienen que maniobrar para no caerse, ya que los pasos están hechos pedazos, la carpeta asfáltica está completamente deteriorada, las luminarias no funcionan, y la parte baja de los pilares del puente es un ‘montarrero’. Esta obra se ha convertido en un dolor de cabeza para los más de 200 mil quevedeños, especialmente para quienes viven y tienen negocios en la zona.
Los concejales Leonardo Jiménez y Robert Alvarado presentaron un Amicus Curiae (amigos de la Corte) en Samborondón (domicilio del contratista Consorcio Puente Desnivel Quevedo) para intervenir en el proceso legal en favor de una de las partes (Municipio de Quevedo).
Según el concejal Jiménez, esta obra inconclusa, que fue entregada apresuradamente por la administración anterior de John Salcedo, está afectando a cuatro sectores: parroquia 24 de Mayo, parroquia Siete de Octubre, Centro Matriz Quevedo y parroquia Viva Alfaro, además de cientos de familias que se realizan diálisis, y negocios como el supermercado Supermaxi.
La obra del puente desnivel de Quevedo tiene más de un año y todavía no ha sido entregada al Ministerio de Obras Públicas por parte del contratista, ya que el anterior alcalde, John Salcedo Cantos, decidió aperturarla el 12 de mayo de 2023, cuando aún faltaban los trabajos complementarios, dos días antes de la posesión del actual alcalde Alexis Matute.
“Nosotros presentamos este Amicus Curiae para defender los derechos de los quevedeños en contra de una sola empresa, frente a más de 200 mil quevedeños. Este puente desnivel fue abierto al paso sin haberse concluido, con un apuro terrible de la administración anterior, con una obra inconclusa. Mire cómo se afectan los derechos e intereses”, manifestó Jiménez.
Luego de la “apertura” de la obra por la administración de Salcedo, la administración actual pidió concluir los trabajos, pero el contratista no se hizo responsable. Por lo tanto, el Municipio acudió a la terminación del contrato de manera unilateral, lo cual fue respondido por el contratista con una acción de protección alegando falta de motivación, y hasta ahora el fallo ha sido favorable para el contratista.
“Y el juez confirmó eso, indicando que efectivamente la asesoría jurídica del GAD Municipal de Quevedo, anteriormente con la procuraduría de la abogada Kerly García, supuestamente no había motivado adecuadamente y por eso les da la razón y ordena que se deje la situación en el estado en que estaba y que el Municipio de Quevedo pueda, si así lo considera, notificar nuevamente la terminación de este contrato, pero de manera motivada”, explicó Jiménez.
Actualmente, el Municipio de Quevedo presentó un recurso de apelación a este fallo ante la Corte de Justicia del Guayas, y es ahí donde, a través del Amicus Curiae, los concejales Jiménez y Alvarado intervendrán a favor del Municipio.
Frente a esta problemática, se habla de una segunda auditoría en febrero debido a que el informe de noviembre de 2023 sobre los dos puentes, en el que se señalaba un faltante de más de 2 millones de dólares, fue dado de baja. El informe manifestaba que esos recursos destinados para la obra de los puentes habían sido desviados para otras cuestiones económicas y no para la obra.
“Había una propuesta de esta empresa para terminar el contrato de mutuo acuerdo y ejecutar la póliza del buen anticipo de la obra. Hay alrededor de medio millón de dólares para dar por terminado ese dolor de cabeza que nos dejó la administración pasada, y eso hay que decirlo a los quevedeños”, finalizó el concejal.
Mientras tanto, siguen las molestias en el puente desnivel, con la esperanza de que se culminen los trabajos y las personas responsables asuman su responsabilidad. Así mismo, existen otras obras abandonadas en la ciudad de Quevedo como el Soterramiento, el Mercado del Río, y el Cuarto Puente de Quevedo, perjudicando a los quevedeños con obras que no fueron entregadas y promesas no cumplidas.