Babahoyo. La falta de asignación de recursos al Municipio de Babahoyo está ocasionando retrasos en varios proyectos enfocados en mejorar los servicios públicos esenciales para los babahoyenses, como la gestión de residuos sólidos y el mejoramiento del agua potable.
El burgomaestre Gustavo Barquet, en una entrevista con ALDIA.COM.EC, mencionó que en este año y siete meses de gestión, el Gobierno no ha asignado los suficientes recursos para llevar a cabo algunos proyectos urgentes: “Ahora tenemos 1 millón 440 mil dólares, en doce meses tuve 1 millón 300 mil, cuando nómina, planilla de seguro social, débito del Banco del Estado y servicios básicos suman 1 millón 300 mil”.
A pesar de la falta de recursos, Barquet menciona que están sobreviviendo con las recaudaciones, gestiones propias e incluso fondos propios, para que los proyectos, como la gestión de residuos sólidos y el mejoramiento del agua potable, estén finalizados en unos meses.
Problemas y soluciones
Barquet manifestó que existe un problema con la recolección de basura, primero porque el consumo ciudadano ha aumentado, lo que ha incrementado los desechos sólidos. A esto se suma que los contenedores de basura no son suficientes, y que la ciudadanía saca los desechos a destiempo.
Además de esta problemática, se presenta otra, los recolectores de basura están obsoletos. Sin embargo, el alcalde expresó que se está buscando una solución a través de bonos: “Tenemos recolectores obsoletos y no hemos podido renovar recolectores por falta de recursos, pero con los bonos que tenemos estamos negociando para comprar tres o cuatro recolectores nuevos, dependiendo del tamaño… Estamos trabajando duro con los inspectores y vamos a renovar los recolectores, hoy mismo tenemos uno prácticamente nuevo… pero también la gente debe poner de su parte, sacan la basura a cualquier hora, y los animales la rompen”, dijo.
Agua potable
Barquet también manifestó que los ciudadanos han reclamado sobre el agua potable y que ya está listo un convenio con Emsaba para la compra de polímeros rápidos que desvanezcan todo el sedimento acumulado en las tuberías, asegurando que el agua llegue limpia a los hogares de los babahoyenses, especialmente en la parte urbana central. Para este proyecto solo falta la aprobación del Concejo Cantonal.
“El agua que sale de la planta está entre un 90% y 95% limpia, pero el problema es que las tuberías están llenas de sedimento. Son 270 kilómetros de tuberías que tenemos en la cabecera parroquial cantonal, y limpiarlas con sopleteo tomaría mucho tiempo. Por eso, la vía más rápida es aplicar polímeros rápidos para limpiar las tuberías”, explicó.
Añadió que este proyecto está previsto para lanzarse entre febrero y marzo, con un valor de 700 mil dólares.
El alcalde mencionó que estos problemas son primordiales para mejorar la calidad de vida de la población, por lo que están trabajando con gestiones propias y a través de bonos.