La Proforma presupuestaria del Gobierno para el año 2019 ha despertado la preocupación de las universidades públicas por el presumible recorte de recursos en el siguiente año. Ante esto, Roberto Passailaigue, rector encargado de la Universidad de Guayaquil, aseguró que este entidad «con el presupuesto que tiene, no puede seguir adelante con el proceso académico. Ahora la entidad se está deteriorando totalmente». Pero recalcó su apertura para tratar el tema en las mesas de trabajo y que «lo mínimo que se podría recibir seria lo destinado actualmente».
“He escuchado las versiones del Ministerio de Economía y Finanzas referente a que existen instituciones generales en el sector público que tienen un presupuesto nominal y que anualmente no lo ejecutan de manera total y esto se ha ido repitiendo de manera paulatina en varios años. Desde ese punto de vista lo que se tiene que hacer es sincerar los presupuestos y si no utilizan el 15% o el 20% de este presupuesto no debería entregarse estos recursos”.
Explicó que esta decisión de recortar excedentes parecería que se quiere aplicar a la educación superior, “lo cuál debería ser analizado en cada caso, para que se determinen circunstancias propias porque no se puede evaluar de manera global a todas o tener los mismos puntos de vista”. En el caso de la U. de Guayaquil comentó que se está revisando el presupuesto que ha sido asignado.
“Efectivamente existe una merma de USD$ 20 millones en cuanto al presupuesto de este año comparado al que consta en el documento presentado a la Asamblea Nacional. También he escuchado que se darán mesas de trabajo entre cada institución y el Ministerio de Finanzas y esperamos a que nos corresponda sentarnos a dialogar”.
Comentó que esta entidad ha tenido problemas grandes en la ejecución de su presupuesto por la “conflictividad que ha existido en el interior”. “Pero eso no significa que la falta de operatividad o la negligencia en el manejo presupuestario realmente no justifique las necesidades de la universidad. Realmente del presupuesto de la entidad el 95% se aplica a salarios”.
Mencionó que debido a esto no queda presupuesto para otros sectores como investigación, docentes y mejoras. “Ni siquiera pedimos aumento de presupuesto sino que se permita trabajar con el mismo que está asignado este año. Nosotros haremos reacondicionamiento para optimizar los recursos que han sido entregados”.
Ante la pregunta de si la U. de Guayaquil se puede mantener con el presupuesto actual, Passailaigue, comentó “que no se puede mantener, de hecho se está deteriorando totalmente, existen aires acondicionados que no funcionan, edificación que están en el mismo estado, no existe dinero para investigación, la vieja casona universitaria y el instituto de diplomacia se caen a pedazos, hay muchos programas paralizados, en fin solo se ha tenido dinero para beneficiar asuntos políticos, entregar contratos ocasionales o becas a sus amigos pero en el fondo no se apoyó al que hacer universitario”.
El rector encargado explicó que “no se puede dar calidad con este presupuesto. Debería analizarse de forma detenida si se pide un aumento de presupuesto. Nosotros vamos un mes como comisión interventora y lo mínimo que podíamos pedir para el funcionamiento de la Universidad es el mismo dinero de este año. No es el óptimo pero nos hemos comprometido que reajustaremos el presupuesto asignado”.
Comentó que en esta entidad existen dispendios, como en los contratos ocasionales, y que ya en diciembre se terminan y no se los renovará, para que estos recursos invertirlos en la docencia, investigación y la reparación de la universidad.
Sobre la eliminación de estos contratos ocasionales comentó que “los informes internos entregados por la Contraloría y por la Comisión del Consejo de Educación Superior (CES) han podido identificar que en los últimos años se han dado 1300 contratos ocasionales. Estamos evaluando cuales realmente se necesitan”.
“Se está haciendo esto para determinar cuáles son necesarios, porque en este caso se ha traído a personas con criterios políticos para que vengan a aportar políticamente a los sectores que han estado manejando la universidad”. Comentó que estos contratos significarán casi el 50% de todo lo que se debería gastar en salarios.
Sobre el proceso de internación que lleva a cabo la Comisión Interventora, “nosotros nos hemos posicionado el 18 de octubre de acuerdo a la Ley tenemos 45 días para recién presentar nuestro diagnóstico y nuestro plan de intervención a la entidad y el monto para llevar adelante este proceso”.
Recordó que esta intervención se dio por los acontecimientos y disturbios que se dieron al interior de la universidad. “Se suspendieron a todas las autoridades de la entidad y ahora tenemos la misión de hacer una intervención integral, renovar autoridades y poder llevar a efecto el proceso excepcional”. Comentó que al término de esto se llamará a elecciones para definir a las autoridades definitivas.
Passailaigue recordó que la intervención inicial será de tres meses y que después el CES definirá cuales será los siguientes pasos dependiendo del reporte que se presente.
“Yo aplaudo la posición del Presidente de la República, Lenin Moreno, siempre dijo que lo relacionado a la educación y salud no será recordado seguramente el Ministerio de Finanzas tiene una visión y en las mesas de trabajo pondremos ponernos de acuerdo. El hecho real es que cada universidad tiene sus propias circunstancias y la U. de Guayaquil con el presupuesto que tiene no puede seguir adelante en el proceso académico”.
Finalizó mencionando que lo mínimo que podrían requerir o pedir es que el próximo año se mantenga el mismo presupuesto del 2018. (BG
Con información Ecuadorinmediato y Aldia.com.ec