A pesar de que las autoridades crean ordenanzas para detener la delincuencia, los dueño de lo ajeno hacen caso omiso.
La mañana del miércoles 31 de julio el Subcentro de Salud de la parroquia San Camilo fue blanco de los antisociales, que no les importó la hora, lugar o personas con el objetivo de llevarse lo que más pudieran.Ni las muestras de sangre se salvaron, sujetos desconocidos a bordo de una motocicleta acorralaron a una enfermera que llevaba una caja con muestras que iban a ser analizadas en el centro de salud.
Los ciudadanos exigen desesperados que las autoridades tomen las acciones pertinentes, debido a que a diario viven con miedo de ser asaltados ya que los delincuentes burlan los controles policiales.