Con el fin de concienciar sobre la problemática del trabajo infantil, técnicos de la Dirección de Desarrollo Social, del Gobierno de Los Ríos, instalaron una carpa lúdica en el parque central de Quevedo, en la que los ciudadanos pudieron interactuar y conocer diversos aspectos relacionados con la misma.
La atención a los grupos vulnerables es una prioridad en la gestión del prefecto Johnny Terán Salcedo, quien ha dado todo el impulso y apoyo a los proyectos que se ejecutan en convenio con el MIES. Uno de esos proyectos es el de Erradicación del Trabajo Infantil (ETI) que, a través de la coordinación de Protección Especial, busca garantizar el disfrute de los derechos de las niñas, niños y adolescentes.
“La carpa lúdica es una actividad que está contemplada dentro de lo que es el Programa de Erradicación del Trabajo Infantil. Nos hemos planteado una intensa agenda llena de actividades que se desarrollará hasta finales del mes de diciembre, la misma que busca prevenir el trabajo infantil y la mendicidad en las calles de varios cantones en donde se ejecuta este proyecto, para lo cual contamos con el invalorable apoyo que nos brinda el señor Prefecto Johnny Terán”, señaló Johana Jara Contreras, coordinadora de Protección Especial del Gobierno de Los Ríos.
Cada fin de semana y en días hábiles están previstas actividades como semaforización y talleres de prevención en Quevedo, Mocache y Buena Fe, conjuntamente con el proyecto de protección especial denominado “Apoyo y Custodia Familiar”. Cabe indicar que por las cercanías de las festividades navideñas y de fin de año hay mucha presencia de niñas y niños que son utilizados por adultos para dedicarse a la mendicidad o al trabajo infantil, lo cual se busca erradicar y prevenir. “Una de las estrategias principales que estamos utilizando es el de la concienciación tanto de las familias como de la sociedad en general acerca de esta problemática que aqueja a un 40 % de la población infantil de Quevedo, Buena Fe y Mocache, a la que se suma la presencia de familias extranjeras”, manifestó la responsable del proyecto.
Maritza Alvarado, miembro del equipo técnico de Apoyo y Custodia Familiar, indica que existen algunas actividades de riesgo a las que no pueden tener acceso los niños, tales como basurales, bananeras, camales, maquinarias agrícolas, venta de caramelos en la transportación pública, etc. “Estamos coordinando con las Juntas Cantonales de Protección de Derechos para prevenir la presencia de niñas y niños trabajando en las calles o en sitios considerados nocivos para su salud y su desarrollo”, indicó la profesional.