El precio del petróleo intermedio de Texas, Estados Unidos (WTI) entró este lunes 20 de abril del 2020 en caída libre a menos de dos horas del cierre del mercado y se desplomó a -37,60 dólares la unidad, su nivel más bajo en la historia a medida que los comerciantes continúan preocupados por una caída en la demanda debido a la pandemia del coronavirus.
A las 13:45, hora Ecuador, los contratos futuros del WTI para entrega en mayo, que expiran mañana, martes 21, restaban USD 13,46 respecto a la sesión del viernes, ahondando en la tendencia bajista de las negociaciones previas a la apertura del mercado y encaminados a registrar el peor día de la historia para el crudo de referencia en EE.UU.
Según los analistas, el desplome se debe al temor por la falta de capacidad en EE.UU. para almacenar crudo en medio del abismal recorte en la demanda provocado por el parón en la actividad consecuencia del coronavirus.
«La destrucción intradía del WTI de hoy es épica en escala y muestra la gran inestabilidad de los contratos de mayo de 2020 ante su expiración de mañana y los miedos a que el almacenamiento no se pueda materializar«, expresó la analista Louise Dickson, de la firma Rystad Energy.
Con el precio del barril de Brent situado en unos USD 26, los analistas de esa firma, no obstante, invitan a observar la diferencia WTI-Brent tomando en cuenta los precios de los contratos de junio del WTI ya que los futuros de referencia en Europa cambian de mes antes que los estadounidenses, explican.
El mercado sigue volátil a pesar de que la OPEP y sus socios acordaron a principios de abril reducir su producción en 9,7 millones de barriles diarios para compensar ese recorte de la demanda ligado al covid-19, que los inversores no parecen creer que sea suficiente.
Los mercados de petróleo se han desplomado en las últimas semanas a su nivel más bajo en casi 20 años, porque los bloqueos y las restricciones de los viajes en todo el mundo tienen un fuerte impacto en la demanda.
La crisis se agravó después de que Arabia Saudita, miembro de la OPEP, lanzara una guerra de precios con Rusia, que no es miembro de esta organización.
Los dos países pusieron punto final a la disputa a principios de este mes aceptando, junto con otros Estados, reducir la producción en casi 10 millones de barriles diarios para impulsar los mercados afectados por el virus.
Pero los precios siguieron cayendo. Los analistas estiman que los recortes no bastan para compensar la caída masiva de la demanda.
“Los precios del crudo siguieron bajo presión”, señala el banco ANZ en una nota.
“Aunque la OPEP ha aceptado una reducción sin precedentes de la producción, el mercado está inundado de petróleo”, añadió, refiriéndose a la Organización de Países Exportadores de Petróleo y a los socios no miembros de la OPEP.
“Todavía se teme que las instalaciones de almacenamiento en Estados Unidos se estén quedando sin capacidad”, estima el banco.