Las autoridades de las principales ciudades estadounidenses se preparan para una nueva jornada de protestas por la muerte del afroamericano George Floyd después de que fuese asesinado por un exceso policial. En Minessota, donde comenzaron desde el viernes las protestas por ser donde murió Floyd, líderes comunitarios y religiosos han pedido a la gente que se quede en sus casas y que cumplan con el toque de queda anunciado por el gobernador Tim Walz y que cubre desde las 20:00 a las 6:00 horas.
«Jóvenes, por favor. Por favor. Quédense en casa esta noche», afirmó Clarence Castile, cuyo sobrino, Philando, murió por una acción policial en 2016. «No permitan que el bien se traduzca en malas palabras. No permitan que se distorsione el mensaje.
Cumplan el toque de queda», dijo el presidente de la Stairstep Foundation, Alfred Babington-Johnson. También el alcalde de Cincinnati, John Cranley, anunció un toque de queda de 22:00 a 6:00 tras los disturbios del viernes.
NYC Mayor Bill de Blasio is now blaming the riots on President Trump saying he “helped to create” the “atmosphere” for them. pic.twitter.com/vjfZ4E9Bti
— Breaking911 (@Breaking911) May 31, 2020
Cranley ha destacado que la mayoría de los manifestantes actuaron de forma pacífica, pero un pequeño grupo causó «muchos daños» en comercios y propiedades.
En Cleveland las protestas ya han comenzado, pero la Policía ha intervenido para dispersar a quienes estaban «lanzando objetos», según recoge la CNN. La manifestación comenzó de forma pacífica, pero después se ordenó dispersar.
En Austin, Texas, los manifestantes cortaron «completamente» la Autopista Interestatal 35 en ambas direcciones, según informó la autoridad de movilidad de la ciudad en Twitter. Mientras, el gobernador de Texas, Greg Abbott ,envió más de 1.500 agentes a Houston, Dallas, San Antonio y Austin.