El retiro electoral de Jaime Nebot, la renuncia de Otto Sonnenholzner a la Vicepresidencia para posiblemente optar por una candidatura presidencial y el anuncio de Rafael Correa de una eventual carrera hacia la Vicepresidencia alborotaron en las últimas semanas el escenario político de cara a las elecciones del 2021. Casi enseguida hubo anuncios de candidaturas y alianzas desde diferentes sectores políticos. Y al momento suenan al menos 20 nombres como posibles aspirantes.
Nebot declinó su candidatura, pero aseguró que su partido, el Social Cristiano, tendrá su propio representante que podría o no salir de sus filas. Hay cinco aspirantes: Cristina Reyes, Henry Kronfle, Henry Cucalón, Cesar Rohón y Luis Fernando Torres.
El PSC, dice su presidente Pascual del Cioppo, ha contratado a las encuestadoras locales Informe Confidencial y Click Report, y otra internacional para medirlos. Y además incluirán nombres de personajes externos. Los resultados saldrán hasta fines de mes.
Aparte, Nebot ha mantenido diálogos con otras figuras. Una de ellas sería Sonnenholzner, comentan otros dirigentes del PSC. Sin embargo, personas de su entorno lo niegan, y dicen que si decide lanzarse será por un partido político no tradicional.
Por lo pronto, con su aval, dirigentes del movimiento ciudadano #SigueOtto recorren el país armando estructuras. Incluso están en proceso de registro de esa marca en el Servicio Nacional de Derechos Intelectuales (Senadi), comenta su director Nicolás Brito.
En varios videos colgados por el grupo en redes sociales Sonnenholzner les agradece por su trabajo. Y no rechaza tajantemente la postulación.
En tanto, el pasado miércoles, agrupaciones políticas afines a Correa anunciaron la conformación del Frente Unidos por la Esperanza (UNES). Entre ellas los movimientos Fuerza Compromiso Social y Centro Democrático.
Esta alianza aún no tiene postulante presidencial. El periodista Carlos Rabascall, quien el año pasado anunció una precandidatura, decidió adherirse a UNES por lo que concretar su aspiración dependerá de la decisión que se tome en las primarias internas.
Correa podría ser quien complete la fórmula si es que hasta septiembre no tiene una sentencia en firme. El exmandatario tiene dos órdenes de prisión preventiva: una por la sentencia en el caso Sobornos 2012-2016 por el delito de cohecho agravado, que está en apelación, y otra en el caso del secuestro de Fernando Balda, en el cual no ha sido juzgado porque esta fuera del país.
Y precisamente Balda anunció, al día siguiente, su precandidatura por el movimiento Libertad es Pueblo, fundado por Gary Moreno, uno de los hermanos del actual mandatario Lenín Moreno. En una rueda de prensa, aseguró que iniciará sus recorridos el 15 de julio.
Meses atrás ya hubo otros anuncios de candidaturas. El primero fue el de Guillermo Lasso, que iría por su tercer intento. César Monge, director del movimiento CREO, señala que su postulación está confirmada y que se oficializará en agosto una vez que se realicen los procesos de democracia interna.
Esta ocasión también se activará la plataforma denominada ‘Compromiso Ecuador 2021’, pero como agrupaciones sociales. Y habrá otra llamada ‘Ecuador Profundo’, que aglutinará a movimientos políticos de carácter local.
Para estos días está prevista, asimismo, la ratificación de la candidatura de Gerson Almeida, quien es pastor evangélico. Y se promociona como el aspirante de ese sector.
Almeida lanzó su postulación el año pasado por el movimiento PRO, pero no logró completar las firmas, así que dice que suscribirá una alianza con un partido nacional, cuyo nombre no revela.
La estrategia en otras tres precandidaturas es la articulación de alianzas.
En el movimiento indígena, agrupado en la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y su brazo político Pachakutik (PK), no se descarta que organizaciones políticas de centro-izquierda apoyen a su candidato.
El coordinador nacional de PK, Marlon Santi, confirmó que hay tres precandidatos: Salvador Quishpe, exprefecto de Zamora Chinchipe; Yaku Pérez, prefecto de Azuay; y Leonidas Iza, presidente del Movimiento Indígena de Cotopaxi.
FUENTE: EL UNIVERSO