Con la llegada de la convergencia tecnológica y las clases virtuales debido a la pandemia por la Covid-19, los menores de edad están más conectados en el internet y por ende, las redes sociales.
Un caso que llamó la atención fue el suicidio de Margaret C., de 15 años, en la parroquia San Camilo, del cantón Quevedo, la noche del viernes 28 de agosto de 2020. La adolescente tomó veneno para ratas que había comprado esa tarde.
Sus padres aseguran que la menor fue inducida por una secta satánica la cual se llama ‘Suicide Silence’, que convenció a la hoy occisa a quitarse la vida de esta forma.
Además, la familia mostró a la Policía Nacional que halló imágenes de que la joven estaba practicando ‘sexting’ (intercambio de imágenes sexuales) con un ciudadano, quien al parecer también pertenecía al grupo.
Hermanas de la iglesia San Cristóbal acudieron al velatorio la mañana de ayer, 30 de agosto, con la finalidad de orar por el alma de Margaret.
“Queridos padres, que esta tragedia sirva para que nosotros concienticemos lo que tenemos que hacer con los hijos: acercarlos más a Dios. (…) Hay muchos grupos que inciden al suicidio en el que el demonio se mete a las redes para hacer que las personas se quiten la vida, hoy le toco a una chica y mañana puede ser cualquiera de sus hijos”, manifestó una religiosa. (EHL)