Inconformes. Así se sienten los vendedores de picantes y otros platos típicos para el desayuno, quienes fueron reubicados el pasado sábado 26 de septiembre de 2020, en la avenida Marcos Quintana, centro de Quevedo.
Estos comerciantes vendían alimentos en la calle Octava, muy cerca de donde expenden prendas de vestir, sin embargo, un proyecto de la Municipalidad los reubicó.
La mañana de ayer, 28 de septiembre, varios comerciantes mostraron su inconformidad con la reubicación. A decir ellos, no fue como se lo planificó en un principio.
“Estamos peor, es una pestilencia, donde se bota el agua, sale todo a la calle, no hubo una planificación correcta, lavan esos baños y eso apesta, esta todo mal organizado”, expresó Deysi Martínez, una comerciante.
Los vendedores manifestaron que pocas son las ventas que se hacen en el día, y que han tenido discrepancias entre ellos por “cazar” a los clientes.
“Nos botan a velocidad y el chiste es que no se vende, la gente no camina por acá (…) anteayer llegó una pareja, los vendedores los acosaban para conseguir la venta y se fueron”, manifestó Fermín Acosta, otro vendedor.
En total son 20 cubículos que fueron reubicados, pero más adelante fueron colocados vendedores de los conocidos caldos de manguera, quienes indicaron que no estaban dentro del proyecto.
“Nosotros no teníamos nada que ver, pero ellos (los otros vendedores) nos jalaron acá, es decir que a la fuerza nos metieron aquí, la gente no nos ve y se va a otro lado, no es así nosotros necesitamos trabajar”, manifestó Nelly Carrillo.
Respuesta
El presidente de la Empresa de Mercados de la Municipalidad, Francisco Duque, indicó que el proyecto apenas está en una primera fase por temas de recursos y, que con el pasar de los días se irán completando las adecuaciones.
“Por ahora se les adecuó la parte eléctrica, de agua, de servicio de alcantarillado, seguridad, los baños portátiles, la lona para proteger a los clientes y el terraplén, lo importante es que ya están allí y ese terreno sólo es para ellos, ya estamos trabajando en algo seguro”, manifestó.
Según el funcionario, los cubículos serán cambiados y también el techado, en un segundo momento. “Tienen condiciones más favorables de las que han tenido hace más de 30 años, tenemos ya el primer paso y gran paso, luego de eso seguiremos trabajando con ellos”, explicó. (EHL)