El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer se conmemora cada 25 de noviembre para denunciar la violencia que se ejerce sobre las mujeres en todo el mundo y reclamar políticas en todos los países para su erradicación.
Algo de historia
La convocatoria fue iniciada por el movimiento feminista latinoamericano en 1981 en conmemoración a la fecha en la que fueron asesinadas, en 1960, las tres hermanas Mirabal (Patria, Minerva y María Teresa), en República Dominicana.
Las hermanas Mirabal, también conocidas como Las Mirabal o Mariposas, fueron tres hermanas dominicanas que se opusieron firmemente a la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo.
Una cuarta hermana, Bélgica Adela «Dedé» Mirabal, no tuvo un papel activo en las actividades hechas contra el dictador. La hermana mayor, Patria, no tenía el mismo nivel de actividad política que sus otras hermanas, pero las apoyaba; incluso prestaba su casa para guardar armamentos y herramientas de los insurgentes.
Las hermanas Mirabal crecieron en un hogar rural acomodado de la sección Ojo de Agua en el municipio Salcedo. El padre de las hermanas, Enrique Mirabal, fue un exitoso hombre de negocios.
Estudiaron como internas en el Colegio Inmaculada Concepción de La Vega, dirigido por monjas españolas de la Orden Terciarias Franciscanas de Jesús y María donde, tanto Minerva como María Teresa, se destacaron por su inteligencia e interés en el estudio.
Cuando Trujillo llegó al poder, su familia perdió casi toda su fortuna. Las Mirabal creían que Trujillo llevaría al país al caos y por ello entraron a formar parte de un grupo de oposición al régimen, conocido como la Agrupación política 14 de junio. Dentro de este grupo eran conocidas como Las Mariposas, se les conocía así, porque ese era el nombre con que Minerva se identificaba en las relaciones políticas.
Dos de las hermanas, Minerva y María Teresa, fueron encarceladas, violadas y torturadas en varias ocasiones, una de ellas fue en la cárcel La Victoria. Ellas y sus esposos fueron sometidos a una cruel tortura durante el régimen de Trujillo. A pesar de estas situaciones, continuaron en su lucha por terminar con la dictadura. Después de varios encarcelamientos, Trujillo decidió terminar con las hermanas.
Un Cambio
En 1999 la jornada de reivindicación fue asumida por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su resolución 54/134 el 17 de diciembre de 1999, entendiendo por violencia contra la mujer «todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada», e invitando a gobiernos, organizaciones internacionales y organizaciones no gubernamentales a convocar actividades dirigidas a sensibilizar a la opinión pública sobre el problema de la violencia contra las mujeres.
Por esto del 25 de noviembre al 10 de diciembre la OPS une sus esfuerzos a la la Campaña de 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género, que este año se celebra con el lema: «Pinta el mundo de naranja: ¡Financiar, responder, prevenir, recopilar!»
La violencia contra las mujeres conlleva graves consecuencias para su salud y su bienestar. La consecuencia más grave es la muerte. La violencia esta asociada con una gama de problemas en la salud física, mental, sexual y reproductiva a corto y largo plazo para las sobrevivientes de violencia sexual y de pareja. La violencia contra las mujeres también afecta a sus hijos e hijas y puede generar altos costos sociales y económicos para estas mujeres, sus familias y las sociedades.
La pandemia en la sombra: violencia contra las mujeres durante el confinamiento
Desde que se desató el brote de COVID-19, los nuevos datos e informes que presentan quienes están en primera línea revelan que se ha intensificado todo tipo de violencia contra las mujeres y las niñas, sobre todo, la violencia en el hogar.
Es la pandemia en la sombra que crece en medio de la crisis de la Covid-19 y se necesita un esfuerzo colectivo general para detenerla. Dado que los casos de COVID-19 siguen sobrecargando los servicios de salud, los servicios esenciales –como los refugios y las líneas de atención en los que se atiende a quienes padecen violencia en el hogar– han alcanzado el límite de su capacidad.
ONU Mujeres brinda información actualizada y apoya los programas vitales para luchar contra la violencia hacia las mujeres que se ejerce a la sombra de la pandemia de COVID-19.