El domingo al medio día el equipo ‘torero’ tomó un avión con rumbo a Brasil para disputar el partido de vuelta por semifinales de la Copa Libertadores.
Aunque el plan era llegar por la noche a Porto Alegre, el vuelo sufrió adversidades y por temas logísticos, la delegación del club ecuatoriano tuvo que pasar la noche en Santa Cruz, Bolivia, y llegará la tarde del lunes a su destino.
Pese a que Barcelona cayó 0-3 ante Gremio, en Guayaquil, sus hinchas son optimistas y no pierden la esperanza de fabricar una nueva hazaña.