En el día de las madres, domingo 09 de mayo, José Miguel Vera Bricio de 48 años, decidió ponerle fin a su vida, con un disparo en la cabeza, por supuestos problemas familiares.
«Él me dijo, no aguanto y saco un arma de su canguro y se disparó, nada se pudo hacer», manifestó llorosa Jazmín Mindiola esposa del occiso.
El fiscal de turno, Marcos Arias realizó el levantamiento de cadáver y autorizó el traslado a la Morgue de la ciudad de Quevedo. (MA)