Algunos pensarán que la vida de una reina significa comodidades y lujos, pero resulta ser que en muchas ocasiones no es así.
Naomi Inga Peñafiel, de 17 años, creyó en sí misma la noche del 22 de mayo de 2021 cuando se coronó Reina del cantón Mocache. Lo dejó todo en el escenario y conquistó con su sencillez al jurado.
Naomi se ha convertido en un ejemplo a seguir en su recinto Peñafiel, y de varias adolescentes que la conocen. Pero no sólo por ser una Reina, sino por su mensaje de superación.
Nació en el seno de una familia de bajos recursos y perdió a su padre a los seis años. Desde ese entonces convivió con sus abuelos, quienes le dieron el estudio y le enseñaron los valores de vida.
Creció oliendo el aroma a cacao y en una casa de caña (en la que aún vive). Ella dice que es del campo y no le da pena. “No me avergüenzo de dónde vengo ni de mis raíces”.
Desde niña tuvo problemas emocionales por la muerte de su padre y el otro compromiso de su madre, sintió que su vida dio giro y que tenía que empezar de nuevo.
Sus cumpleaños no eran los mismos, no tenía ese calor paternal, pero sus abuelos le enseñaron a ganarse la vida y conocer el valor de las cosas y las personas.
Jovial y siempre para adelante
Pese a las adversidades económicas y la falta de una figura paterna y materna, Naomi es una joven jovial, pacífica y sobre todo, aplicada en los estudios.
“Me gustaba participar en todo lo que realizaban las instituciones, en eventos cívicos, en bailes, exposiciones, para mí era algo normal, incluso me decían ‘arroz con pollo”, recuerda y ríe.
Otra actividad que le apasiona es la agricultura, en su hogar tiene un pequeño terreno donde se siembra y vende cacao. Con eso se han podido ganar la vida. Pero también tiene el apoyo de sus tías.
De hecho, espera ingresar a la universidad para estudiar ingeniería en alimentos y poder retribuirle a sus abuelos todo el esfuerzo que han hecho por ella, primero con una casa.
Una de sus tías la motivó a participar en el Reinado de Mocache y ella aceptó con mucha fe. Sus proyectos son ayudar a las personas de bajos recursos, adultos mayores y niños sin padres.
“Gracias a las bendiciones de Dios y los planes de Él que son perfectos son reina actual de Mocache, es un orgullo representarlo, porque no es sólo llevar una corona y una cinta, es asumir responsabilidades por el bien de los demás”, finalizó.
Redacción: Erika Hernández