En los últimos años, en la parroquia San Carlos, del cantón Quevedo, se han instalado industrias balseras que generan fuentes de empleo a toda la comunidad sancarleña. El cultivo de la madera de balsa tiene una gran demanda en el mercado internacional.
Esto ha sido aprovechado por grandes empresarios que llegan a la parroquia, como Balsaflex Teconoblock e IMOI, (Industria Maderera Orly Intriago). La balsera IMOI cumple un papel importante con la exportación de balsa que es utilizada para crear energía eólica y mitigar la contaminación.
“En otros países no se utiliza la represa porque estamos reteniendo un líquido vital, ellos generan energía renovable que busca minimizar la contaminación. Por lo que la balsa del Ecuador está en primer lugar de exportación en el mundo”, resaltó Orly Intriago, gerente de IMOI.
Su empresa genera muchas fuentes de empleo directa e indirectamente. El agricultor por una hectárea de balsa que se cosecha, en buen estado tiene 600 árboles productivos, lo cual tendría una ganancia de 25.000 a 30.000 dólares.
IMOI da la semilla a través de una campaña. Los trabajadores directos de la empresa laboran sin problema ya que esta madera es muy cotizada. Se la corta en listones y son muy ligeras, pero resistentes a la vez. Intriago comenta que la industria balsera está creciendo, pero debe aprovecharse su materia prima más en Ecuador, como lo hacen los países desarrollados. (I)