Ibarra, una de las ciudades más importantes en el norte del país, construyó mediante un crédito del Ministerio de Finanzas, una planta de tratamiento de aguas residuales, la cual funcionará de manera automatizada.
El alcalde de la ciudad, Álvaro Castillo, informó que la obra representa una inversión de 30 millones de dólares. “Es la primera planta de tratamiento de aguas residuales automatizada que existe en el país. Con la entrada en funcionamiento, lograremos mejorar el ambiente, cumplir con las normativas para el tratamiento de las aguas servidas y cuidar la salud de la población”, añadió.
Se estima que más de 197 mil personas se beneficiarán con el funcionamiento de la planta, ubicada en las riberas del río Tahuando. El proyecto inició a finales del 2014, en la actualidad ya está funcionando, una vez que pasó todas las pruebas.
En esta planta, mediante el proceso físico-químico y tratamiento biológico, el agua que proviene de los hogares e industrias ibarreñas quedará tratada y apta para ser utilizada en actividades como la agricultura. CNF/El Ciudadano.