QUEVEDO. – Un gesto amistoso de un taxista ejecutivo terminó en una cuantiosa sanción de 800 dólares, un carro retenido y nueve puntos menos a la licencia.
Joaldo Ortega ‘taxiaba’ por la avenida Jaime Roldós Aguilera del cantón Quevedo cuando a lo lejos avizoró que su exprofesor de conducción le hacía la típica señal de ´pare’. Lo que nunca se imaginó es que este pequeño gesto le ocasionaría graves problemas y lo dejaría varios días sin trabajar.
Sucede que Ortega es conductor de un taxi ejecutivo, es decir, presta el servicio ‘puerta a puerta’ y tiene prohibido recoger pasajeros en la calle. Pero el pasado 1 de febrero, Ortega cometió un error.
Suceso
Ese día, Ortega recogió a su exprofesor de conducción en la calle luego de que esté le hiciera la señal de ‘pare’. Sin embargo, no se percató que estaba siendo observado por el ‘brazo largo de la Ley’, es decir, la agencia de tránsito.
Los agentes de la entidad al ver la infracción lo citaron inmediatamente y embarcaron el vehículo en la grúa. Ortega contó que todo fue tan rápido y acusó a su exprofesor de una emboscada en acuerdo con taxistas convencionales, ya que el pasajero tendría uno.
Una vez en los patios de retención, el gremio amarillo ejecutivo acudió enardecida en busca de una explicación y darle apoyo moral a Ortega. “Nosotros somos compañeros, unámonos para combatir al informalismo, pero es más fácil a los más tontos”, dijo la presidenta de Prestocar, Diana Ávila.
Mientras que los taxistas convencionales que también estaban en el lugar mencionaron que muchos ejecutivos irrespetan la Ley y no aceptan que están mal.
“Ellos dicen que fue un plan para ir en contra de los taxistas ejecutivos. Lo que pasa es que hubo una reunión con las distintas autoridades de Tránsito y se ordenó que los operativos deben de hacerse”, manifestó el dirigente de la Unión de Taxis Convencionales, Wellington Arévalo.
Aclaración del Sindicato de Choferes
El Sindicato de Choferes de Quevedo se pronunció a través de su secretario general, Patricio Reyes, desvirtuando que la persona que se embarcó en el taxi ejecutivo sea un instructor de su escuela. (I)