Gustavo Alfaro, técnico de la selección de Ecuador, en una extensa entrevista cuenta las experiencias vividas al asumir el mando de la Tri y una de estas fue que tuvo que convencer a algunos futbolistas para integrar el combinado, porque para ellos “no era prioridad”.
Alfaro arribó al país en septiembre del 2020 para asumir el reto de adiestrar a la Tricolor con la cual ganó el boleto para la próxima cita, donde además de los dueños de casa tendrá como rivales a Países Bajos y Senegal, en el grupo A.
En una extensa entrevista al portal FIFA Plus, el argentino comentó que tuvo que generar el “sentido de pertenencia” para armar su plantel.
“Cuando llegué a Ecuador tenía 30 días para armar un equipo para jugar contra Argentina. Empecé a hablar con jugadores y me encontré con esas respuestas: algunos no querían venir a la Selección. No era su prioridad. Ahí entendí la gravedad del escenario: vos podés tener jugadores buenos o malos, pero tener futbolistas desinteresados es muy grave. Se había perdido el sentido de pertenencia, que es lo más sublime que puede sentir un futbolista. El proceso, entonces, debía ser diferente: armar un plantel, formar un grupo, para después tener un equipo”, expresó el DT.
“Teníamos que diseñar un sueño lo suficientemente grande como para que los 17 millones de ecuatorianos entren en él y para que todos quieran participar de ese lugar. Cuando me presentaron como entrenador me dijeron: “Profe, te entregamos la ilusión de 17 millones de personas”. No era la ilusión: me transferían la responsabilidad de no defraudar a un país”, añadió Alfaro.
El entrenador sostuvo que conversó con los futbolistas y los convenció para que vuelvan a tener el “sentido de pertenencia”.
“Hicimos un ejercicio de imaginación en el que les planteé todo el recorrido: el punto de partida hasta el final posible, con la clasificación al Mundial, y cómo eso iba cambiando a base de lo que ellos hacían. Y los llevé al escenario final: el pitido final del partido contra Argentina en la última fecha, y yo les decía que en ese momento se iban a mirar, a abrazar por la clasificación, y que eso era la gloria”, precisó.
“Les dije que eso era la gloria, y los invité a eso: a la gloria. A pelear por la gloria. En ese momento se pusieron de pie e hicieron un grito de guerra. Y dije: “Ya está, la piedra fundacional está puesta”, agregó el argentino.
Alfaro también está contento por el hecho de que la Tricolor sea protagonista del duelo inaugural de la Copa del Mundo, el próximo domingo 20 de noviembre.
“Es algo maravilloso. Cuando vi Ecuador-Qatar, dije, chau, los ojos del mundo van a estar ahí. Es un privilegio muy grande. Yo soy muy creyente y les dije a los chicos: por algo nos tocó, por algo teníamos que estar acá después de tanto sacrificio y sufrimiento. Esto es un premio, y hay que vivirlo y disfrutarlo como eso: con el privilegio de estar en el partido que inaugura la Copa Mundial”, comentó.
“Cuando esté por empezar el partido, no tengas dudas de que voy a mirar al cielo, a mis seres queridos, a mi viejo, a mi vieja, a mi hermana que están ahí, a Daniel Comba, mi representante, que se fue y me dijo que iba a jugar una Copa Mundial, para decirles que llegué, que estoy acá, en este escenario”, concluyó Alfaro en su diálogo con FIFA Plus.