Alexis Matute es académico, catedrático universitario y actualmente participa para asambleísta alterno de la mano del movimiento Centro Democrático, lista 1.
En una entrevista con ALDIA.COM.EC habló sobre los nuevos rostros en la política ecuatoriana y los proyectos en temas legislativos que impulsarían como partido:
¿Qué criterio tiene usted referente a los nuevos rostros que se están evidenciando en la política nacional?
Es placentero observar que en la gran mayoría de la papeleta para este 7 de febrero existen muchos rostros nuevos, acompañados de rostros con experiencia.
Es placentero para la juventud y para aquellos que no hemos participado en política poder hacer parte, en su momento, de la toma de decisiones en las diferentes instituciones, ya sea desde la votación popular o desde la asignación por el Ejecutivo.
Me da mucha alegría ver como colegas jóvenes están participando en este proceso electoral, un ejemplo es la Lista 1 a la que yo pertenezco: el 75% de quienes estamos participando jamás hemos estado involucrados en un proceso electoral, somos gente nueva.
Esto en cuanto al tema de asambleístas, pero así también vemos rostros nuevos que estarían dentro de la papeleta para presidentes de la República y entre ellos, estaría su candidato Andrés Arauz.
Justamente, y también es placentero ver a un economista joven próximo a sacar su doctorado en economía por la Universidad Autónoma de México participando. Tiene 35 años, algo impensado en otros tiempos, y satisfactoriamente encabeza la intención del voto en las diferentes encuestadoras.
Un economista visionario que habla muchos idiomas y está presto a poder modificar lo que desde nuestra percepción ha sido totalmente errado en términos económicos, políticos y sociales.
La presencia de Andrés Arauz en la papeleta da un ‘refresh’ a esa vieja tradición política que ha venido manejándose en el país y particularmente en la provincia.
Desde su punto de vista, ¿por qué considera que sería oportuno que gente nueva y joven vaya ocupando este tipo de cargos? En muchas ocasiones hay quienes dicen que es mejor optar por lo que ya se conoce
Hay que entender dos cosas muy marcantes: hay que ser políticos altamente técnicos y técnicos altamente políticos.
La presencia de Andrés Arauz no solo es por su juventud, sino por su preparación académica.
Es formado en la Universidad de Michigan, no todos los latinoamericanos tenemos la oportunidad de formarnos en las mejores universidades del mundo y él así lo hizo, ha sido representante en el Banco Central, ha estado al frente de Ministerio del Programa de Becas en el Gobierno de Rafael Correa, ha sido partícipe de la toma decisiones en los aspectos económicos en el país.
Si a esa experiencia en el sector público y esa capacidad técnica, le sumamos la juventud, estamos hablando de nuevas épocas en nuestra República.
Con toda esta situación que está atravesando nuestro país de la pandemia y se habla de una crisis económica ¿Cuál sería esa alternativa para que tanto la gente joven como aquellos que dicen tener la experiencia puedan optar con esa solución que el país amerita?
Bueno aquí las decisiones son netamente políticas. Conocemos la capacidad productiva del Estado, un Estado que tiene de Producto Interno Bruto alrededor de 104 mil millones de dólares y que tiene la capacidad para hacerle frente a este tipo de adversidades, lo que no ha existido es la voluntad política para que los recursos que genera el Estado vayan destinado a este tipo de adversidades.
Por ejemplo, en el año 2016 vivimos un terremoto en la provincia de Manabí y los recursos fueron destinados a tratar de mejorar aquellas adversidades.
Lo que estamos viviendo con la pandemia, obviamente no vamos a erradicar el virus, sin embargo, la toma de decisiones no ha sido para tratar de mejorar los sistemas del Ministerio de Salud, sino que al contrario, se prefirió el pago de una deuda externa anticipada a potencializar el sistema de Salud.
Despidieron médicos, enfermeras, paramédicos y si a esto le agregamos que uno de los sectores perjudicados ha sido el de la educación, donde docentes de colegios y escuelas también han sido despedidos.
Entonces no es que el Estado no tiene la capacidad de afrontar las adversidades, no hay voluntad política.
¿Qué proyecto impulsaría el movimiento si llega a la Asamblea?
Una de las primeras sería ser mayoría en la Asamblea Nacional para derogar la mal llamada Ley de Ayuda Humanitaria, han sido alrededor de 300 mil desempleados; desde mi punto de vista, producto de la mala gestión del Gobierno, y más de 1 millón de personas que dependen de los ingresos.
Para la provincia lo que hemos conversado con los candidatos es tratar de mejorar las condiciones de vida del sector rural, llegar al sector rural con alternativas y con ideas aterrizables.
Por ejemplo, mejorar los mecanismos de comercialización, de rubros tan importantes para la provincia como es el banano. No es posible que a la actualidad se sigan pagando los precios mínimos de sustentación, no acorde a las realidades o a los costos de producción por hectárea para los bananeros; y ese mismo caso para los maiceros de Ventanas, arroceros de Baba e incluso sandieros de la zona sur.
Como catedrático y universitario, soy un convencido que debemos involucrar a la universidad ecuatoriana en la toma de decisiones. Debemos hacerlos partícipes a cada uno de los estudiantes en sus últimos cursos con sus decanos y sus investigadores, para que ellos sean quienes conduzcan a los agricultores, a los empresarios para mejores y más altos rendimientos de los rubros.
¿Qué les dice a aquellas personas que de pronto indican que de ganar Andrés Arauz se vendría un tema similar a lo que se vive en Cuba y Venezuela?
Es una pregunta que la vengo escuchando cuando era universitario en el 2006, me decían que si ganaba Correa íbamos a volvernos como Venezuela, en el 2007 me decían lo mismo y también en el 2008. Han pasado 12 años y seguimos esperando aquella premonición de la derecha, no caigamos en ese juego.
Los problemas de Venezuela son alrededor de 30 mil millones de dólares que tiene represados en los Estados Unidos. Ningún país del mundo viviría así. Ecuador no soportaría ni una retención de 3 mil millones.
Aquí es muy fácil, la paz para Venezuela significaría doblegar y ceder los recursos naturales como el petróleo y vivir sumiso ante las principales potencias mundiales.
Y lo segundo es entender que los procesos democráticos que ha venido arrastrando Venezuela desde el año 98, cuando asumió Hugo Chávez, han sido siempre por votación popular, tanto en el Parlamento, en el Senado, como en la Presidencia en los tiempos de Chávez y Nicolás Maduro.
El caso cubano es un ejemplo de dignidad, es un ejemplo de querer salir, de potencializar la educación. La medicina cubana es la mejor del mundo, y los médicos cubanos asisten en los lugares donde nuestros médicos no quieren asistir.
Conozco las realidades, y los médicos cubanos iban a trabajar en los estados más apartados. (I)