Los expertos tienen pocas dudas del lugar en el que el mexicano Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán cumplirá su pena de prisión en Estados Unidos: la ADX «Supermax» de Florence, Colorado, alberga a algunos de los delincuentes más conocidos que pasaron por los juzgados del país.
Conocido como el «Alcatraz de las montañas Rocosas», en el penal purgan su condena Ted Kaczynski, conocido como Unabomber, y el conspirador del 11-S Zacarias Moussaoui.
Los reos están en aislados 23 horas al día y tienen una mínima interacción humana. Reciben la comida en sus celdas, donde comen a apenas unos metros del váter.
La cárcel está protegida por alambradas con cuchillas y torres de vigilancia y patrullas armadas.
Guzmán fue condenado el martes por encabezar una de las mayores redes de tráfico de drogas del mundo. En el pasado se escapó dos vences de prisiones de alta seguridad de México.
NADIE HA ESCAPADO DEL PENAL
La ADX Florence es una prisión que está a cargo de la Agencia Federal de Prisiones. Posee cerca de 490 celdas individuales construidas enteramente de hormigón de 2,1 por 3,6 metros.
Además, las celdas cuentan con duchas automatizadas, televisor y una sólida estructura en concreto donde duermen, están insonorizadas, es decir, evitan que el sonido salga al exterior y viceversa, esto, para evitar que los reos se comuniquen entre sí.
El recinto penal también posee una pequeña ventana o ranura de aproximadamente 107 centímetros de alto por 10 de ancho donde se puede divisar una parte del exterior, sillas o bancos de concreto inamovibles, cámaras de seguridad y una compuerta que se abre y cierra automáticamente.
Los presos pasan 23 horas del día en confinamiento, sin embargo, se les permite una hora de recreación diaria donde pueden ejercitarse, esto la realizan en una celda construida de metal situada estratégicamente en un patio, rodeada de muros de 6 metros de altura.
La prisión cuenta además con 1.400 compuertas de acero controladas por control remoto, alambre de púas que se elevan a 12 pies de altura en la parte exterior, rayos láser, cámaras, perros guardianes, una docena de torres que se elevan por varios metros de altura con francotiradores y un sistema especial de seguridad por fuera de la cárcel.
Por su extrema seguridad y la arquitectura empleada en su construcción, ningún prisionero ha logrado escapar o realizar un intento de fuga y es comúnmente citada como la cárcel más segura de los Estados Unidos y del mundo.