Caminar por las calles de Quevedo sigue siendo un martirio para las personas que tienen algún tipo de discapacidad, el transporte público también es otra de las problemáticas.
Hoy, 3 de diciembre de 2020, el mundo recuerda el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, pero a su vez, recuerda la deuda que tienen los estados para poder mejorar el estilo de vida de estas personas.
El ciudadano Wilson Chafla transitaba por la calle 7 de Octubre, aparte de ser un hombre de la tercera edad, la artrosis acabó con la fuerza de su pierna izquierda y ahora camina con ayuda de un bastón.
Él cuestiona la falta de inclusión en las calles principales y el irrespeto que existe al momento de intentar subir a un bus urbano.
Dice que una persona con silla de ruedas o discapacidad visual no puede acceder a los espacios públicos tan fácilmente debido a las rampas anti-técnicas y las pocas señaléticas.
El presidente de la Asociación de Discapacitados de Quevedo, José Gonzales, manifestó que hay que diferenciar primero la deuda que tiene el Gobierno Estatal que es mucho más amplia.
“El compromiso de campaña de las 25.000 viviendas por año que no se ha cumplido en su totalidad, también están los bonos de desarrollo humano y la situación crítica que enfrenta este grupo vulnerable”, manifestó.
El presupuesto para el Consejo de Igualdad de Derechos también se ha visto afectado por la crisis, pero más allá de los recursos, Gonzáles reconoce la falta de un equipo técnico para las investigaciones de campo.
“El objetivo es conversar con las autoridades de turno para analizar cada una de las situaciones y poder mejorar el funcionamiento público y privado en beneficio a la inclusión social de los grupos de atención prioritaria”, finalizó.
Según el Consejo Nacional de Igualdad de Discapacidades, en Quevedo existen 4.539 personas con discapacidad actualmente, el 53,32% tienen discapacidad física, el 8,92% visual, 21,57% intelectual, el 12,82% auditiva y el 3,37% psicológica. (EHL)