Doménica -nombre ficticio- pertenece al área comercial de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT). Trabajó con normalidad hasta la noche del miércoles 14 de julio. Terminó su jornada y apagó la laptop que la CNT le había entregado para que pudiera laborar desde su casa. Al día siguiente empezaron los problemas. Encendió el computador y ya no podía ingresar a su correo electrónico institucional ni al sistema informático de la empresa.
Les contó el problema a sus compañeros a través de un mensaje por la aplicación WhatsApp y se dio cuenta de que la situación era generalizada. Nadie sabía qué sucedía. Al mediodía de ese jueves 15 de julio recibió la orden de apagar la laptop y no prenderla hasta nuevo aviso. No hubo mayor explicación.
Desde entonces utiliza su computador personal para continuar con sus actividades. A falta de correo electrónico se comunica con sus compañeros y jefes a través de WhatsApp. “Cada cual está gestionando las cosas como puede”, comentó.
El problema comenzó el miércoles 14 de julio a las 18:30. Nadie sabe cómo exactamente los cibercriminales entraron al sistema de la CNT y comenzaron a encriptar los archivos paralizando paulatinamente las actividades de la Corporación. Algunos dicen que fue a través de un correo electrónico, pero no hay certeza.