Quevedo. Los sueños de los emprendedores del cantón Quevedo mueren lentamente tras la ola delincuencial que se desató.
Entre el año 2022 y lo que va del 2023 son decenas de ciudadanos los que han decidido cerrar sus negocios debido al cobro de las ‘vacunas’, asaltos y robos, que les estaban realizando personas desconocidas.
Aunque la Policía Nacional no cuenta con cifras reales de estos casos, este es un hecho que se conoce a voz populi.
Uno de ellos es el caso que reveló Anita Alcívar, la propietaria de ‘Las papas de Anita’ un reconocido restaurante de comidas rápidas, ubicado en la parroquia El Guayacán.
De acuerdo con la mujer, los delivery ya no quieren ir hasta su local a recoger los pedidos porque son perseguidos por los antisociales. «Yo ahora solo vendo un pollito, ya no hay quincenas ni fin de mes», lamentó.
Anita recordó la semana pasada, llegó hasta su local una pareja, el hombre iba vestido de militar, le permitió el acceso creyendo que se trataría de unos clientes; sin embargo, se trataba de un par de asaltantes.
Lo que vivió después, fue lo peor, la mujer que acompañaba al supuesto militar, la sometió para arrebatarle $30 dólares que había hecho de las ventas y posteriormente se dieron a la fuga, no sin antes robarle a todos los clientes que estaban en el lugar.
«Uno de los clientes, aseguró que los ‘pillos’ iban por el», contó Anita.
Desde ese momento, Anita revela sentir temor de atender ya que no se puede confiar en nadie.
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