En tres operativos ejecutados este fin de semana por Fiscalía y Policía Antinarcóticos, se incautaron varios cargamentos de droga y se detuvo a trece personas, que fueron puestos a órdenes de las autoridades judiciales.
En la ciudad de Quevedo, diez personas fueron detenidas (ocho hombres y dos mujeres). A ellos se les encontraron 26 kilos de marihuana y 25 gramos de cocaína. La droga fue encontrada al interior de un domicilio ubicado en el sector del “Parque Bocachico”, en la parroquia San Camilo, donde se almacenaba la sustancia, cuyo fin era el microtráfico en este sector.
En la audiencia de flagrancia, en la Unidad Judicial de Quevedo, el fiscal Marco Galeas presentó, como elementos de convicción, los partes informativos y de detención, el acta de pesaje y verificación de la droga incautada, teléfonos celulares y documentación, que fueron ingresados en la cadena de custodia en la Policía Antinarcóticos de Los Ríos.
La jueza Jenny Freire Arias acogió el pedido de Fiscalía y dictó prisión preventiva contra los diez procesados, disponiendo de treinta días para el cierre de instrucción fiscal.
En otro operativo, ejecutado la noche del sábado 20 de junio en la parroquia Patricia Pilar, en Buena fe, se decomisaron 18 kilos de cocaína y 24 de heroína, que se encontraban al interior de un camión proveniente de la provincia del Carchi. Tres personas fueron detenidas: el conductor del automotor y otros dos ciudadanos que escoltaban el cargamento.
En la audiencia de flagrancia, en la Unidad Judicial Penal de Buena Fe, la fiscal Flor Ferrín presentó como elementos de convicción: los partes informativos y de detención, el acta de pesaje y verificación de la droga incautada y el vehículo de carga retenido. Todo ingresó a la cadena de custodia de la Policía Antinarcóticos.
El juez de Garantías Penales, César Paucar, dictó prisión preventiva contra los procesados y dispuso su traslado al centro penitenciario de esta provincia. La instrucción fiscal durará treinta días.
Finalmente, un cargamento de 299 kilos de cocaína fue descubierto en el centro de este cantón, en la calle 7 de Agosto, con dirección a la vía Panamericana. Al interior de un camión con doble fondo se detectó el cargamento que iba embalado en cinta adhesiva, con forma de ladrillos. Las personas que estaban en el automotor se percataron del operativo policial en el sector y huyeron. Fiscalía abrió una investigación por este caso.
Estos casos se procesaron con base en el artículo 220, numeral 1, literal d (gran escala), del Código Orgánico Integral Penal (COIP), que sanciona la posesión, distribución, traslado y venta de alcaloides, con pena privativa de libertad de diez a trece años.