En las instalaciones de la Unidad de Vigilancia Comunitaria (UVC) de Quevedo, una decena de propietarios de bares y discotecas presentaron su plan de retorno con los protocolos de bioseguridad que aplicarán a partir del 12 de septiembre, si el Comité de Operaciones de Emergencias Cantonal (COE) lo autoriza.
La presidenta de la Asociación de Bares y Karaokes de Quevedo, Jenny Reyes, indicó que el 90% de los propietarios han tenido que cerrar para siempre sus puertas. “La zona rosa en San Camilo ya no existe, todos dejaron el negocio o crearon otro negocio”, recalcó.
Resaltó que fueron los primeros en cerrar por la pandemia y pese a eso no se ha tomado en consideración su pedido. Contó que varios propietarios alquilan la mitad de los establecimientos y tuvieron que hacer préstamos para no perder el negocio, pero que “ya no pueden más”.
“Somos padres de familia y tenemos que mantener nuestros hogares, tenemos el derecho de tener ingresos, nosotros pertenecemos al turismo del cantón”, manifestó.
El propietario del bar restaurant ‘Jager Meister’, Miguel Macías, indicó que los protocolos consisten en la toma de temperatura, desinfección de manos, bandeja de desinfección, fumigación de los locales cada dos horas y trabajar con un aforo reducido del 50% para evitar clausuras.
“No solamente está en juego la salud de nuestros clientes, sino también de los propietarios, y estamos conscientes de eso. En este momento, del 100% de bares y discotecas, sólo el 10% sobrevivió, no queremos ser parte de los que cerraron”, lamentó Macías. (EHL)
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