El cuerpo de Naomi Arcentales Sabando fue exhumado a las 08:00 de este miércoles, luego de que varios ciudadanos de Pedernales pasaran la noche en el cementerio de esa localidad, donde fue sepultada hace una semana, pues se regó la noticia de que habían querido profanar la tumba la noche del martes.
Miembros de la Policía pasaron la noche también custodiando la bóveda donde reposaba el cuerpo de la joven modelo, cuya familia pidió que se le hiciera una segunda autopsia para descartar que Naomi, de 23 años, haya sido asesinada.
Ella murió el 12 de diciembre en el departamento donde vivía con su pareja, en un edificio de Manta. El novio de la fallecida es Juan Carlos I., fiscal de Manabí, quien fue suspendido por el Consejo de la Judicatura.
La primera autopsia determinó que la mujer supuestamente se había suicidado.
La familia de Arcentales tiene dudas, pues aseguró que en la escena no había indicios de cómo Naomi se habría colgado de un cable, como habría fallecido.
Sus padres pidieron que se hiciera otra autopsia tras conocerse que la hoy fallecida supuestamente era víctima de violencia de género, pues se viralizaron fotos y chats.
El cuerpo de Naomi es trasladado a Quito para realizar la segunda autopsia. Se espera que al mediodía llegue al Laboratorio de Medicina Legal, pero se desconoce cuándo se realizará el procedimiento y cuándo estarían listos los resultados.
Además, esta semana se esperaba que el fiscal Juan Carlos I., novio de Naomi, diera su versión a la fiscal Libanesa Vásquez, quien investiga el caso desde Guayaquil, sin embargo, esta diligencia se ha suspendido dos veces.
El lunes se anunció que el martes 21 la fiscal de Guayas viajaría a Manta para receptar la versión, sin embargo, el abogado Luiggi García, representante de la familia Arcentales, indicó que la fiscal Vásquez revocó el impulso mediante el cual se tomaría la versión presencial al novio de Naomi.