El Frente Económico del Gobierno anunció que las medidas adoptadas para reactivar la economía protegerán la producción y el empleo de los ecuatorianos. Entre las estrategias anunciadas por el Primer Mandatario en su intervención de ayer, se destaca un mayor control a la evasión fiscal y al contrabando en las fronteras ya que éstas están entre las principales formas de defraudar al Fisco.
Por ello, haciendo eco de las palabras del Presidente de la República, Lenín Moreno, las instituciones relacionadas con el tema comienzan a anunciar sus líneas de acción. “A partir de hoy declaramos la guerra al contrabando y la evasión fiscal porque son los enemigos del trabajo y la producción”, enfatizó Mauro Andino, director de la Secretaría Nacional de la Aduana del Ecuador (Senae).
Desde 2012, el Estado ha perdido cerca de 12.000 millones de dólares por concepto de productos sobrefacturados, según las cifras que expuso Andino. Estos artículos ingresan por las fronteras y atentan contra la producción nacional ya que provocan una competencia desleal pues suelen ser ofertados al público a precios mucho menores.
Según los cálculos de la Senae, el país pierde anualmente 2.000 millones de dólares por defraudación fiscal. Para contrarrestar esta situación, la Senae planteó dos mecanismos disuasivos: establecer un arancel de 10 centavos por producto importado y rematar contenedores con bienes sobrefacturados.
Andino instó a los ciudadanos a combatir de manera conjunta esta “forma de corrupción que la orquestan ciertos empresarios”. Incluso los productos agrícolas como la leche, la cebolla y la papa son afectados por el contrabando fronterizo, aseguró el funcionario. AD / El Ciudadano