Un enfrentamiento entre personas privadas de la libertad y la detonación de al menos cuatro disparos se registraron la tarde del martes, 2 de enero del 2018, en el Centro de Rehabilitación Social de Turi, en Cuenca. La trifulca ocurrió en el pabellón A de máxima seguridad y no hubo personas heridas por armas de fuego.
De acuerdo con las investigaciones preliminares de la Fiscalía y de la Policía de Criminalística se trató de un enfrentamiento entre dos bandas que buscan controlar este pabellón, que alberga a 279 presos considerados peligrosos. El hecho ocurrió en horas de visita cuando había familiares en los patios. En principio se habló de un intento de fuga, pero tras activarse los protocolos de emergencias se descartó este hecho.
Más de 100 personas, entre familiares de los presos y personal administrativo, fueron evacuadas por seguridad y para el resto de la tarde se suspendieron las visitas. Un preso de esta misma celda resultó con una herida importante en la mano, pero se investiga –a través de las cámaras de video vigilancia- si fue parte del enfrentamiento.
Él fue atendido en la enfermería y le tomaron 16 puntos. Asimismo, otras seis personas fueron aisladas para investigaciones. Los hechos generaron incertidumbre y preocupación entre los familiares. Desde los exteriores se observó a algunos presos gritar por las rejas de las ventanas de las celdas para llamar la atención. Enseguida llegó personal de la Fiscalía, Defensoría del Pueblo, Ministerio del Interior…
Según William Calle, jefe de la Policía de la subzona Azuay, para controlar los incidentes se redobló la seguridad interna y externa con 240 uniformados de grupos especiales como el GIR, GOE, UMO, DGI, entre otros. En días normales este centro que alberga a más de 2 600 presos cuenta con el resguardo de 60 uniformados. Con ellos se montó un operativo de requisa en todo el pabellón A de máxima seguridad y se encontraron dos armas nueve milímetros en el patio y en el techo del tercer piso.
También teléfonos celulares, armas cortopunzantes, sustancia sujetas a investigación, entre otros objetos. Lizandro Martínez, director de centro penitenciario, dijo que también se investiga cómo ingresaron estos elementos a las celdas, aunque admitió que en las requisas que realizan cada semana sacan elementos prohibidos.
Él dijo que en algunas ocasiones –a través de los detectores electrónicos- les han encontrado a las mujeres que llegan de visita sustancias sujetas a investigación y celulares dentro de la vagina. Los hechos registrados ya son parte de una investigación de la Fiscalía.El Comercio