BABAHOYO. Ya son cinco los propietarios de negocios ubicados en Babahoyo, los que han sido amenazados por supuestas organizaciones delictivas, con el fin de pedir dinero a cambio de protección.
El más reciente hecho extorsivo se registró la noche del lunes 27 de septiembre, a los dueños de un asadero de pollos ubicado entre las calles Ricaurte y Juan X Marcos. El propietario de este negocio contó que recibió amenazas a través de mensajes de WhatsApp.
Todo comenzó con un panfleto amenazante, pero se hizo efectivo con el restaurante de Tía Zulu, primer local que recibió cuatro disparos, previo a mensajes extorsivos.
“Ya está la denuncia interpuesta, ahora pedimos el resguardo respectivo de la Policía. Como comerciantes trabajar así no es negocio. Con la denuncia tengo respaldo de que si algo me llega a pasar a mí o a algún familiar, tienen indicios de dónde proviene el ataque. La Policía debe tener más apoyo de las leyes y jueces y fiscales para no dejar salir de la cárcel a quienes cometan los delitos”, expresó un comerciante afectado.
Un ciudadano que prefirió mantener su nombre en reserva indicó que la inversión en Babahoyo se marchará porque no hay garantías para poder trabajar libremente.