Antonio Ingroia, miembro de la veeduría internacional que investiga el proceso judicial contra el expresidente Rafael Correa por presunta asociación ilícita y secuestro del político Fernando Balda, afirmó que una de las irregularidades o anomalías que se pudio observar fue el pedido del fiscal para aplazar la audiencia de evaluación y preparatoria de juicio contra el exprimer mandatario, el pasado martes 18 de septiembre. «La Fiscalía sabe las anomalías del caso y tienen miedo de los veedores y medios internacionales»
“La razón por la que se constituye la veeduría es que se vincula a anomalías de este proceso judicial. Porque el Instituto de Pensamiento Político Económico, que nos invitó aquí, nos pidió que controlemos, con nuestra experiencia, para ver si en este caso se respetan las reglas, los principios fundamentales y las categorías básicas en el derecho”.
Ingroia recordó que esta veeduría está conformada por varios juristas y profesionales de diversos países como Colombia, Italia, Bélgica, entre otros. “Yo tengo experiencia de fiscal en Italia por más de 25 años y ahora como abogado”.
Afirmó que tienen dudas del este proceso, “yo he visto actas del procesos y un informe de derechos de la Fiscalía, que no me convence nada. Creo que es una demostración de un fenómeno muy grave que es la politización de la justicia. Pero yo estoy aquí para ver y hacer una evaluación de que es lo que pasa”.
Sobre las anomalías o irregularidades en el proceso, “hay muchas. La primera es que este proceso fue concluido ya hace muchos años en Colombia, los hechos fueron concentrados en este país y el presunto secuestro que duró solamente 40 minutos no tiene prueba de violencia contra el señor Fernando Balda. Los secuestradores lo liberaron después”.
“En este caso lo que se quiere hacer es procesar al expresidente Rafael Correa, con una teoría absurda, y que dicen que el primer mandatario tiene que prender por todos los delitos”. Recordó que en ese momento se determinó que este caso fue secuestro simple, “la figura más baja de secuestro del ordenamiento penal”.
Ingroia cuestionó que bajo esta teoría ahora a “todos los presidentes del mundo tienen que ser procesados por los delios cometidos por el resto de funcionarios. Es algo absurdo”. Comentó que hay varias anomalías que están concernientes en el proceso o acusación. “En términos de jurisdicción falta porque esto fue en Colombia, segundo pasaron seis años después de hacer un proceso contra el expresidente, tercera anomalía es que no hay defensa de la garantía del imputado y hay una presión sobre la jueza”.
Sobre este último afirmó que la jueza del caso, Daniella Camacho, se encuentra en un proceso de evaluación, “hay un momento, una fase de institucionalización del país. Eso es otra anomalía”.
Ingroia afirmó que en las audiencias anteriores han visto “señales preocupantes de esa presión”. “La jueza en un momento paró al abogado de Rafael Correa, Caupolicán Ochoa. No permitió que concluya su intervención. En ese momento Fernando Balda empezó a gritar y pedía a la jueza expulsar al señor abogado”.
“La jueza después de esta actitud no dijo nada, es algo que yo jamás he visto. Balda se comportó como si fuera dueño de la audiencia. La jueza estaba intimidada, me parece, frente de una evidente agresión por parte de una de las partes procesales. Todos los acusados del mundo tienen el derecho a la defensa”.
Recordó que otra de las irregularidades es que se haya encargado un fiscal específicamente en este caso. Ingroia afirmó que si las anomalías se comprueban este proceso no sería válido, “eso es así. Inclusive otra de las anomalías fue que la Fiscalía el mismo día de la audiencia, media hora antes de la apertura de la audiencia, depositó una instancia para hacer postergar la misma. Porque nosotros estamos aquí y la Fiscalía sabe las anomalías del caso y tienen miedo de los veedores internacionales y de los medio”.
Comentó que antes de este proceso en Europa no se conocía sobre la audiencia y el proceso judicial contra el expresidente Rafael Correa. “En este momento yo estoy haciendo un reporte cotidiano con todos los medios para informar en Europa”.
Ingroia agradeció a lo ciudadanos ecuatorianos que escribieron para apoyar el proceso de la veeduría internacional. “Quieren que nos quedemos, ya veremos que se podrá hacer, todos tenemos una agenda difícil de compromisos en Europa. Estamos verificando si se puede. Porque hay señales que la Fiscalía no nos quiere aquí”. (BGV)
Fuente: Ecuadorinmediato