Un año ha transcurrido desde que José Adolfo Macías Villamar, alias «Fito», líder de la poderosa organización criminal «Los Choneros», se evadió de la cárcel Regional de Guayaquil en un hecho que sacudió los cimientos del sistema penitenciario ecuatoriano.
A pesar de los intensos operativos policiales, la notificación roja de Interpol y las sanciones internacionales, el paradero del narcotraficante sigue siendo un misterio.
Tras la fuga de «Fito» desencadenó una ola de violencia en el país, con enfrentamientos entre bandas criminales, masacres en cárceles y atentados contra autoridades.
La fuga de «Fito» ha generado una fragmentación en «Los Choneros» y otras organizaciones criminales, lo que ha intensificado la lucha por el control del territorio.
Tras este acontecimiento el Gobierno ecuatoriano respondió a la crisis con la declaración del estado de excepción, las medidas implementadas y sus resultados.
Las hipótesis
Entre los ciudadanos existe la teoría de que «Fito» pudo haberse sometido a una cirugía plástica y cruzado la frontera hacia la selva del Darién.
Su fuga ha sido comparada con la de El Chapo Guzmán y la posibilidad de que «Fito» se esconda en una zona montañosa o selvática de difícil acceso.
Paises como Argentina, Colombia y Perú investigan los posibles refugios del narcotraficante.
Las sanciones
Esta fuga también desencadenó las sanciones impuestas por Estados Unidos a «Los Choneros» y a «Fito» y su impacto en las operaciones de la organización criminal.
Estas sanciones han fortalecido la cooperación internacional en la búsqueda del narcotraficante.
El perfil
Adolfo Macías Villamar, alias ‘Fito’, tiene 44 años y es considerado uno de los criminales más peligrosos de Ecuador. Fue condenado a 34 años de prisión por delitos como narcotráfico, delincuencia organizada y asesinato. En 2011, tras su condena, fue recluido en varias cárceles de máxima seguridad, incluida La Roca, en Guayaquil, de donde se fugó en 2013 junto con otro líder de la banda.
El narcotraficante también estuvo involucrado en varios incidentes violentos dentro de las prisiones, como ataques y masacres. Tras la fuga de ‘Fito’, el gobierno ecuatoriano declaró una “guerra” contra las organizaciones criminales, catalogando a 22 grupos delincuenciales como terroristas.
La fuga de ‘Fito’ sigue siendo uno de los temas más preocupantes para las autoridades de seguridad en Ecuador, que continúan en su búsqueda mientras enfrentan una creciente ola de violencia vinculada al crimen organizado.
Cierre
La fuga de «Fito» sigue siendo uno de los mayores enigmas de la seguridad ecuatoriana. Un año después, el narcotraficante continúa prófugo y su sombra se cierne sobre el país, generando incertidumbre y violencia. Las autoridades continúan la búsqueda, pero el tiempo juega en contra y la complejidad de las redes criminales dificulta su captura.