Es la historia de Joel Saona Garofalo, un joven babahoyense de 25 años, que empujado por la crisis sanitaria ahora reparte pedidos en una modesta bicicleta.
Joel, se graduó de Ingeniero Comercial hace un año y cómo todo joven que intenta despegar en una difícil sociedad, ha probado en varios empleos, trabajó en el CNE para la época electoral, luego fue contratado en una cadena de supermercados como cajero pero no fue renovado porque esa empresa no contrata personas con títulos profesionales para ese puesto.
En su búsqueda, estaba a punto de convertirse en profesor de una importante Unidad Educativa en #Babahoyo, “el rector ya me había dado su palabra que iba a ser contratado, di clases demostrativas por algunos días, pero lamentablemente al darse la noticia del Covid, decidieron no contratar a nadie” apuntó.
Su hija, motor de impulso.
Finalmente llegó el momento de tomar una decisión, pues el amor por su pequeña bebé de tan solo meses de nacida, le dio la fortaleza para emprender un camino alterno, dejar colgado en la pared su título profesional y desempolvar la vieja bicicleta de su padre y salir a repartir pedidos en la calle.
“Tengo una bebé hermosa y al ver que no tenía ingresos de ningún tipo, opté por salir a entregar pedidos ganándome 0,50 centavos por cada entrega. Hay gente que se burla porque saben que tengo una carrera terminada y ando en una bicicleta panadera por las calles de la ciudad repartiendo comida, pero no me enfermo por aquello, más que todo porque mi hija es el impulso y por ella lo hago, para darle lo que necesite” señaló Joel.
A Joel Saona, podrá contactarlo al teléfono 0979921103 para cualquier pedido a domicilio o mandado, él irá gustoso a realizarlo y quien sabe, pronto podrá comprar una moto y seguro cuando pase la crisis, podrá retomar su camino y convertirse en un gran profesor.
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