En un partido de fútbol decisivo en Tailandia ocurrió algo insólito, pues un futbolista pateó muy fuerte un tiro penal y la pelota rebota en mitad del travesaño. El autor del tiro se agachó la mirada lamentándose la oportunidad fallida, mientras que el arquero salió del pórtico celebrando de felicidad, la cual le duraría poco ya que acto seguido el balón, que había volado muy alto tras el potente rebote cae en el área penal y se mete lamentablemente al arco desprotegido. Éste video se ha hecho viral en las redes sociales y ya aparece en varios portales web.