Puebloviejo. ¡Insólito! Se llevó a velar otro cadáver, pensando que era su hijo. Los parecidos y las casualidades, muchas veces engañan a las personas que en algún momento pasan por el dolor de perder un familiar.
Este caso insólito de velar otro cadáver lo vivió Pablo Ortiz, un riosense que habita en el sector 25 de Mayo del cantón Puebloviejo.
Quien, junto a su familia y por confusión, veló por alrededor de una hora el cadáver de otro joven, que había sido baleado en Puebloviejo.
La historia de Pablo la encontramos en los exteriores de la morgue de Babahoyo, que andaba por el lugar, después de haber llegado a devolver el cadáver un joven que no era el de su hijo Freddy Ortiz, de 23 años.
Según relató Pablo, todo ocurrió porque su hijo ya tenía varios días desaparecido y, aunque acostumbra a perderse debido a su adicción, esta vez fueron muchos días, por lo que sospechó que algo malo le hubiera ocurrido.
Fue así que se enteró que en la morgue estaba el cadáver de un joven y fue a verificar, la primera impresión de Pablo fue que efectivamente se trataba de su hijo Freddy.
Cadáver no tenía tatuaje, su hijo sí tiene uno
La funeraria trasladó el féretro a una localidad, pero gracias a una videollamada de otro hijo, quien le hizo caer en cuenta de un tatuaje que tenía su hijo en su cuerpo, por lo que al revisarlo no lo tenía y se dio cuenta que no se trataba de su hijo.
Enseguida informó a la Policía para que realice los trámites respectivos, retiren el cuerpo para inmediatamente dar de baja el documento de defunción e informar en el Registro Civil de la novedad para que no sea registrado como fallecido.
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Pablo, ya está seguro más que seguro que su hijo Freddy está vivo, porque a las horas conversó con él y le informó que se había quedado en una casa durmiendo.
Ahora, este padre de familia quedó gastado, pues tuvo que comprar la caja y pagar otros valores que se hacen durante estos duros momentos.