El presidente saliente de la Asamblea Nacional, César Litardo, se retira asegurando que lo hace con la frente en alto, destacando la aprobación de más de 20 leyes, además de conducir varios juicios políticos.
Litardo, de 42 años, es ingeniero comercial y afiliado a Alianza PAIS, movimiento por el que llegó a la Asamblea como legislador por la provincia de Los Ríos en 2017, y desde el 14 de mayo de 2019 asumió la presidencia del organismo, tras ser elegido con 78 votos a favor.
Antes de ser parte de la primera función del Estado, fue docente de la Universidad Técnica Estatal de Quevedo, gerente de la Fundación Quevedo es mi ciudad, que regeneró el malecón y otros espacios públicos de la urbe fluminense.
Cuando llegó a la función Legislativa, formó parte de la Comisión de Soberanía Alimentaria y Desarrollo del Sector Agropecuario y Pesquero, en 2018 conformó una comisión especializada ocasional para aprobar la Ley Derogatoria de la Ley de Plusvalía y la Ley reformatoria del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social; y fue parte de una comisión especializada ocasional sobre Seguridad fronteriza.
En su rendición de cuentas, Litardo dijo que en su periodo se cumplió una destaca actuación, que incluso hizo historia, también indicó que frente a las limitaciones y afrontando grandes retos, la Asamblea Nacional mostró fortaleza y mantuvo sus actividades.
Se presentó en los últimos comicios para una reelección, pero no logró los votos necesarios para seguir en la Asamblea Nacional, cuyo nuevo periodo iniciará el próximo 14 de mayo.
Tras este revés, Litardo anunció que dejaría la actividad política, considerando que durante su gestión cumplió con los objetivos que se habían propuesto. Sin embargo, hereda a los nuevos legisladores una Asamblea con el 2% de aceptación, y llena de acusaciones, como el cobro de diezmos, parlamentarios con carnés de discapacidad, obtenidos de forma irregular, y participación en el reparto de hospitales, lo que costó la cabeza de varios asambleístas.
Por: Stalin Briones