Es común ver letreros de “Se alquila” en varias partes de la urbe, esto debido a que miles de negocios fueron gravemente impactados por la pandemia del Covid-19, y dejaron dichos espacios para buscar otras alternativas de ingresos.
Sin embargo, esto también ha perjudicado a quienes se dedican al negocio de alquiler, ya que no hay personas que arrienden los espacios, y esto se convierte en una cadena de crisis económica.
Danny Echeverría tiene un espacio para alquilar desde hace cerca de un año. Antes de la pandemia, cuenta, había un juego de billar, pero con las prohibiciones tuvieron que cerrar y ahora están buscando otro inquilino.
“Es un sitio estratégico, pero debido a la pandemia se abstienen de alquilar porque no pueden pagar el arriendo que es de 200 dólares, es un espacio amplio, pero prefieren ahora, todos los negocios, vender en internet”, comentó.
Mientras que Felipe Rivera tiene varios espacios en la avenida Carlos Julio Arosemena, frente al Ministerio de Trabajo, antes de la pandemia, bares y restaurantes ocupaban dichos lugares y recibían a los universitarios, trabajadores y hombres de negocio, ahora todo está cerrado.
“La mayoría de aquellos dejaron la actividad por completo, no es que están en suspenso ni nada por estilo, sino que abandonaron todo. Los locales producían alrededor de 2.500 mensuales, pero ahora no produce ni 400 ni 500 dólares (…) y esto se seguirá prolongando porque la económica no tiene crecimiento mínimo (…)”, resaltó. (EHL)