“Tal vez te digan: ‘¡Ven con nosotros! […] Hallaremos toda clase de riquezas y llenaremos con despojos nuestras casas.
Comparte tu destino con nosotros, y compartiremos toda una misma bolsa’. Pero, hijo mío, no vayas por su camino; ¡aleja tus pasos de sus veredas! Sus pies corren hacia el mal, ¡se apresuran a derramar sangre!” (Proverbios 1:11-16).
Efraín creció en el seno de una familia cristiana que lo enseñó a amar a Dios. Cuando llegó a la adolescencia comenzó a participar activamente en las actividades de la iglesia. Además, tomó la decisión de bautizarse. Sin embargo, por aquellos años se hizo amigo de Miguel, uno de sus compañeros de la escuela. Miguel era un joven al que no le gustaba estudiar ni recibir consejos de sus padres, más bien, prefería salir con sus amigos, asistir a fiestas y consumir bebidas alcohólicas. Le parecía ridículo que Efraín asistiera a la iglesia, así que paulatinamente comenzó a alejarlo de las actividades eclesiásticas. Al poco tiempo, Efraín empezó a imitar las acciones de Miguel y se volvió un joven irresponsable, rebelde y libertino. Sus calificaciones bajaron sensiblemente. Un día, al salir de una fiesta lo golpearon brutalmente y apenas pudo llegar a su casa. Incluso en una ocasión estuvo a punto de perder la vida en un accidente automovilístico en el que Miguel conducía bajo los efectos del alcohol. Los padres de Efraín vivían en una constante angustia. Finalmente, Efraín decidió alejarse de Miguel y tratar de darle un nuevo rumbo a su vida. Había perdido varios años de estudio, pero regresó a la escuela y terminó sus cursos pendientes. Después asistió a la universidad y se graduó años más tarde.
La influencia de una mala amistad puede destruir al joven más prometedor. La elección de las amistades es de vital importancia para aprovechar al máximo la juventud. Por eso dice Elena de White: “Ustedes pasarán por este mundo solamente una vez. Por lo tanto, no elijan como compañeros a jóvenes y señoritas que los induzcan a seguir por el mal camino. Aléjense de estos tentadores, pues son instrumentos al servicio de Satanás, utilizados por él a fin de engañar a las almas para que deshonren al Señor. […] No den al enemigo ventaja alguna” {El Cristo triunfante, p. 177],
El Señor puede ayudarte a encontrar amigos entrañables que te ayuden a ser una mejor persona y desarrollar tus talentos en tu paso por este mundo. Incluye esa petición en tus oraciones de este día.
DEVOCIÓN MATUTINA PARA JÓVENES 2018
¡RENUÉVATE!
Alejandro Medina Villarreal
Lecturas devocionales para Jóvenes 2018