Luego de que se revelaran quejas de robos dentro de algunas unidades educativas durante la pandemia, tal como se dio esta semana en el colegio Nicolás Infante Díaz, de Quevedo, donde presuntos vándalos ingresaron a un aula de clase con la intención de robar, pero al no encontrar nada, incendiaron enseres; la Policía indicó que no tienen competencia en la parte interna y que no han recibido denuncias.
“La problemática se produce en el interior de las escuelas, entonces para nosotros es complicado mientras no se hayan presentado denuncias, nosotros no sabemos qué pasa en el interior (…) igual como en la cárcel, manejamos la parte externa, la parte interna manejan los guías”, indicó Geovanny Arguello, jefe de la Policía Judicial de Quevedo.
Arguello aseguró que los uniformados realizan operativos y patrullajes en los exteriores de las unidades, pero «el delincuente no ingresa por la puerta principal sino sube o ingresa por lugares donde no se lo puede ver (…) es complicado brindar una seguridad interna”, reiteró.
En horas de la mañana de ayer, 28 de agosto de 2020, un trabajador de la escuela Estenio Burgos Galarza, de la parroquia San Carlos, reportó que delincuentes dañaron las rejas y se llevaron un televisor, ventilador y otros utensilios de un aula de clase.
Esto ha preocupado a padres y docentes, quienes comentan que todo el respaldo está en manos del Distrito.
La directora Distrital de Educación Quevedo-Mocache, Liliana Litardo, indicó que las autoridades de las unidades educativas comunican e inmediatamente se pone la denuncia en la Fiscalía. Pero que los datos exactos los daría a conocer en los próximos días a este medio de comunicación. (EHL)
