El alcalde Matute informó durante la reunión que el municipio enfrenta una deuda significativa de aproximadamente 4 millones de dólares en asignaciones pendientes correspondientes a los meses de octubre (mitad), noviembre y junio.
Matute detalló que, además de los salarios atrasados, también existe una deuda con el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), por la cual se ha realizado un pago inicial de aproximadamente 923 mil dólares, el 25 de junio; mientras que el saldo restante se ha acordado diferir durante los próximos seis años, sujeto a la habilitación de la plataforma correspondiente por parte del IESS.
En cuanto a la recaudación municipal, el alcalde destacó que los ingresos han sido insuficientes en los últimos meses, con un promedio mensual cercano a los 400 mil dólares, pero con cifras más bajas durante los meses de octubre, noviembre y diciembre.
La situación financiera comprometida del municipio se ve agravada por múltiples créditos pendientes con el Banco del Estado (BEDE), de los cuales aún se adeudan 11 créditos, de las 17 que adquirieron las administraciones anteriores.
Matute reconoció los esfuerzos realizados para sostener la infraestructura municipal y asegurar recursos para las necesidades operativas, incluyendo la provisión de servicios esenciales y mantenimiento y adquisición de nueva flota vehicular.
La mesa de trabajo se instaló como un espacio crucial para negociar soluciones que satisfagan las demandas de los trabajadores municipales, quienes además de los pagos pendientes, solicitan mejoras en la seguridad social y provisión de uniformes adecuados para desempeñar sus labores.
La incertidumbre persiste mientras las partes involucradas buscan alcanzar acuerdos en una mesa de diálogo que mitiguen la crisis financiera y laboral que afecta al Muncipio de Quevedo.
Allí se evacuarán varios puntos de los pliegos de peticiones de los obreros.
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