Nerviosismo, miradas ansiosas y mucho compañerismo se evidenciaba en cada una de las 11 personas privadas de libertad (PPL) que rindieron la prueba ‘Ser Bachiller’, para acceder a una carrera universitaria, en el Centro de Rehabilitación Social Turi. “Al perder mi libertad pensé que mis sueños terminaron en ese preciso momento. Gracias al apoyo de mi familia y las autoridades pude hacer realidad metas que había dejado rezagadas”, dijo Javier S., músico de profesión.
Previo a rendir la evaluación conformada por 155 preguntas, los privados de libertad fueron parte de una capacitación y refuerzo de conocimientos, aquí docentes del Ministerio de Educación, en conjunto con PPL que se desempeñan como tutores, impartieron asignaturas como: matemáticas, estudios sociales, ciencias naturales, lenguaje y comunicación, pensamiento abstracto y razonamiento verbal.
Con esta propuesta, el Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, en coordinación con la Secretaria de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescy) y el Instituto Nacional de Evaluación Educativa, garantizan el derecho a la educación a los PPL. DVL /El Ciudadano