Quevedo. 12 vendedores de comida de la Plaza de Picanteros siguen sin poder trabajar en los módulos que fueron creados para ellos, por fallo judicial.
El Municipio de Quevedo perdió el juicio contra Mario Mártire, propietario de una parte del terreno donde se construyó la Plazoleta, también conocida como ‘Food Garden’.
La sentencia de forma verbal resolvió que se vulneraron los derechos de propiedad privada contra Mártire y declaró nula la utilidad pública, obligando al Cabildo a devolver el terreno.
Sin embargo, el procurador síndico del Municipio, Tirso Mosquera, informó que apelarán la sentencia.
Preocupación
La obra municipal tuvo un costo de 150 mil dólares y el objetivo era reubicar a los vendedores de comida a un lugar más organizado, óptimo y saludable.
Pero el tema ha retrocedido, ya que 12 de los 28 comerciantes tuvieron que ser reubicados a un lado de la obra, sin techo y con sus propios medios para no quedarse sin trabajar.
La juguera Sara Coello manifestó que desean volver a trabajar en los módulos y esperan que tanto el propietario como el Cabildo se “conmuevan”, porque han perdido muchos clientes.
“Estamos mal, es una situación muy incómoda, uno quiere superarse, pero estamos vuelta en el piedrerío. Nosotros no tenemos la culpa”, dijo. (I)