Quevedo. Pasar por el anillo vial de Quevedo es sinónimo de peligro para muchos profesionales del volante, sobre todo de quienes conducen vehículos de transporte pesado, pues este gremio se ha convertido en ‘presa fácil’ de asaltantes que incursionan en la maleza a la espera de que sus víctimas pasen por el sitio para posteriormente interceptarlas y despojarlas de la carga y de sus objetos personales de valor.
Algunos choferes también han sufrido el robo de los vehículos que conducían. Aunque por normativa vial muchos vehículos de transporte pesado que deben pasar por Quevedo para dirigirse a otras provincias no puede ingresar a la urbe, algunos se resisten a esta disposición, ya que les representa peligro esta zona del cantón.
A pesar de que en algunos tramos del anillo vial de Quevedo hay resguardo policial, el miedo invade a los conductores que transitan por esta vía que distribuye el tránsito y evita que automotores de gran tonelaje ingresen a la zona urbana.
La problemática radica en que hay tramos sin presencia policial, a esto se le suma la poca iluminación del sitio y la presencia de caminos de tercer orden que permiten el rápido escape que los sospechosos.
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