QUEVEDO. Ya han pasado 15 días en los que Anggelo Alexander Macías, de 20 años de edad y su primo, el abogado Jorge Armando Morales Macías, identificado con el alias de ‘Pipo’, fueron encontrados baleados e incinerados.
Aunque no hay mayores detalles de lo que ocurrió la mañana del 3 de julio, en el recinto Faita, en la parroquia rural San Carlos, sus familiares se muestran más tranquilos al saber que ya lograron sepultarlos, algo que les parecía casi imposible.
¿Qué pasó?
El crimen fue descubierto por los comuneros del sector La Marina, del recinto Faita, a eso de las 07:30 del domingo 3 de julio.
Allí, los cuerpos aún estaban ardiendo en llamas por lo que llamaron de inmediato al 911.
Durante el levantamiento de los cadáveres se descubrió que uno de ellos estaba decapitado, pero hasta ese momento no se conocía sus identidades.
De inmediato se lo identificó como el abogado Armando Morales. Esa noticia cayó como un balde agua fría a la familia. Y se conoció que la otra víctima era Anggelo.
¿Cómo lograron sepultarlos en tiempo récord?
Como ambos cuerpos se encontraban calcinados, en el Centro Forense se negaron a entregarlos hasta que un antropólogo realice las pruebas respectivas.
El lunes, 4 de julio, en la mañana un equipo de Aldia.com.ec realizó un reportaje desde la casa de la familia Macías en donde se hizo un llamado a las autoridades para que se haga urgente la entrega de los cadáveres.
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40 minutos después, la médico forense, llamó a don Antonio Macías, padre de Anggelo, para indicarle que vaya el martes en la mañana para una entrevista con el antropólogo.
Así fue que el martes, a las 16:00 la familia Macías logró retirar el cadáver del joven, lo velaron y posteriormente le dieron sepultura.
«Gracias al reportaje de ustedes (Aldia.com.ec) logramos sepultar a mi hijo ya que el mensaje llegó a las autoridades», dijo don Antonio.
¿Qué pasó con el abogado?
De acuerdo con don Macías, tras sepultar a su hijo, conoció que la cabeza de su sobrino, Antonio Morales, había aparecido.
Al día siguiente del hallazgo el cuerpo de Morales fue entregado a sus familiares.
Esto permitió que ambas personas sean sepultadas a los pocos días de su asesinato.
Sobre lo ocurrido no se ha conocido ningún detalle, por ahora los familiares de las víctimas han dejado todo en manos de Dios.