Wilfrido Ángel Gualpa, oriundo de la provincia de Bolívar era un comerciante de 47 años, que residía desde hace muchos años en la Ciudad de Quevedo, estaba casado y era padre de familia.
El hecho ocurrió en el Recinto La Loma del cantón Urdaneta, mientras “Gualpita” como lo llamaban sus amigos; se encontraba dentro de su camioneta, parqueado afuera de la residencia de uno de sus clientes para hacer el cobro de un televisor, cuando se acercaron los presuntos delincuentes y le propinaron dos tiros en medio de un fallido robo.
El hombre aún con vida fue trasladado hacia el hospital Martin Icaza de Babahoyo, donde lamentablemente falleció mientras le practicaban una cirugía de emergencia para salvar su vida. Pero todos los esfuerzos fueron en vano.
Hoy en la mañana su cuerpo fue sepultado en el cementerio Colina de los recuerdos de Quevedo.