El jueves 31 de enero, en la Sala de Crisis del Servicio Integrado de Seguridad ECU 911 en Quito a través de la plataforma tecnológica del servicio de emergencias ecuatoriano se realizó el monitoreo
de las acciones ejecutadas en seis provincias del Ecuador como parte del simulacro nacional de tsunami, que fue presidido por el Vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner. En esta actividad participaron también el Ing. Stalin Basantes, Director General del ECU 911; Alexandra Ocles, Directora del Servicio Nacional de Riesgos y Emergencias, junto a varias autoridades del Gobierno Central.
En el ECU 911 de Quito se instaló el Comité de Operaciones de Emergencias Nacional, encabezado por el Vicepresidente de la República, y desde ahí se coordinaron las acciones planificadas como parte del simulacro.
Más de 500 servidores del ECU 911 estuvieron activos para coordinar la atención de eventuales emergencias relacionadas con la simulación. Durante el simulacro nacional de terremoto y tsunami, al 9-1-1 no se reportaron incidentes relevantes relacionados directamente con las acciones planificadas para esta actividad.
Durante el ejercicio a través de más de 1.500 cámaras del sistema de videovigilancia del ECU 911 ubicadas en las provincias de Esmeraldas, Manabí, Guayas, Santa Elena, Galápagos y El Oro se
monitoreó el desarrollo de las actividades. De estos dispositivos, 197 estuvieron ubicados específicamente en las rutas de evacuación y puntos de encuentro y contaron con Megafonía IP, además se activó el Sistema de Alerta Temprana instalado en las provincias de Manabí y Esmeraldas.
La jornada permitió probar la operatividad de los sistemas de comunicación con los que cuenta el ECU 911 y que en estos casos sirven para la toma de decisiones y coordinación de acciones de
respuesta inmediata. A través del sistema de Megafonía IP, se emitieron mensajes preventivos con indicaciones para las personas que habitan las zonas vulnerables a este tipo de eventos naturales.
Esta actividad se realizó para generar en la ciudadanía una cultura preventiva, que ante la eventual ocurrencia de un desastre natural, permita a la población saber qué hacer y cómo actuar ante una emergencia de esa magnitud. Según datos de las instituciones que planificaron y ejecutaron el
simulacro se estima que más de 80.000 personas participaron en la actividad.
En las instalaciones de los centros ECU 911 de las provincias del perfil costanero se activaron los Comités de Operaciones de Emergencias (COE), que permitieron coordinar los procesos comunicativos y la logística de la actividad. Durante todo el ejercicio, se mantuvo conexión permanente con los COE provinciales a través del sistema de comunicación del ECU 911.
Este ejercicio permitió medir la operatividad de los planes de contingencia y tiempos de evacuación de la población que participó. De esta forma, las autoridades diseñarán acciones y protocolos enfocados en optimizar los tiempos de respuesta ante desastres naturales de magnitud y reforzar las
actividades de capacitación.