Un tigrillo con quemaduras de segundo y tercer grado en el 30 % de su cuerpo fue rescatado en Milagro y trasladado a las instalaciones de Mansión Mascota, al norte de Guayaquil, para tratar su grave condición.
Eliana Molineros, directora de Mansión Mascota y del proyecto Sacha, comentó que el felino fue traído por miembros de la Unidad de Policía de Medio Ambiente (UPMA) el pasado 7 de noviembre : «Unas personas lo encontraron en la parroquia Roberto Astudillo y lo llevaron a un consultorio veterinario en Milagro donde le brindaron los primeros auxilios», dice.
La especialista asegura que el tigrillo se vio acorralado por la quema del rastrojo o del barbecho –restos de tallos y hojas que quedan en el terreno tras cortar un cultivo– en una plantación de caña de azúcar.
«Cuando queman echan gasolina en todo el cultivo y el incendio que se arma es agresivo y extenso. Hay animales que viven dentro de los cultivos y como los incendios son agresivos y no progresivos los animales no alcanzan a salir y se queman. Este (el tigrillo rescatado) logró salir, pero la mayoría simplemente mueren», indica Molineros.
Al espécimen se le han realizado exámenes completos del perfil básico de sangre para detectar enfermedades infecciosas virales y ecografías de pulmones ya que en este tipo de casos las vías respiratorias se queman por la inhalación de humo.
Sin embargo, los expertos todavía no han podido determinar el tipo de tigrillo que es el animal: «Estamos entre que es un leopardus pardalis, que es uno de los más grandes que hay, con algún problema de desarrollo porque está bajo de peso; o es un lepardus tigrinus, que es una especie más pequeña, y sería adulto porque los dientes que tiene es de un felino adulto, pero el tamaño no coincide con los dientes».
Molineros indica que cada día el felino presenta leve mejoría, pero su pronóstico sigue siendo reservado.
«Necesitamos que la ciudadanía nos ayude con menudencias, pollo, vendajes especiales para quemaduras, huevos».
El Universo