La Fuerza Armada venezolana se declaró en “alerta” para evitar una violación del territorio ante la pretensión del opositor Juan Guaidó de hacer entrar el sábado ayuda humanitaria acopiada en Colombia, Brasil y Curazao, isla con cuya frontera marítima y aérea cerró este martes.
El presidente Nicolás Maduro dijo haber recibido este martes la promesa de “lealtad” en una reunión con “1.000 comandantes militares”, realizada en vísperas de la movilización que convocó Guaidó para acompañar a brigadas de voluntarios que irán por la carga humanitaria a las fronteras.
“La Fuerza Armada permanecerá desplegada y alerta a lo largo de las fronteras (…) para evitar cualquier violación a la integridad de su territorio”, aseguró el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino.
Reconocido por 50 países como presidente interino, Guaidó encabezó un debate en el Congreso, de mayoría opositora, que aprobó el ingreso de la ayuda. “Es una orden directa para la Fuerza Armada que deben cumplir de manera inmediata”, aseguró.
Padrino aseguró que los militares no se dejarán “chantajear” y calificó de “sarta de mentiras” que el presidente estadounidense Donald Trump y Guaidó hablen de la “supuesta ayuda humanitaria” como un choque entre la Fuerza Armada y los venezolanos.
Cargamentos de medicinas y alimentos enviados por Estados Unidos están almacenados en la ciudad colombiana de Cúcuta, cerca del puente limítrofe de Tienditas, bloqueado por militares venezolanos.
Brasil, que instalará un centro de acopio en el estado fronterizo de Roraima, prepara un operativo para brindar ayuda humanitaria en “cooperación con el gobierno de Estados Unidos”, dijo el portavoz, Otávio Régo Barros.
Las autoridades ordenaron el cierre de la frontera marítima y aérea de Venezuela con Aruba, Bonaire y Curazao, confirmó a AFP el comandante de esa región, almirante Vladimir Quintero.